Delphi Automotive Systems España (DASE), cuyas operaciones se centran en la planta de componentes de automoción de Puerto Real, había presentado ya la solicitud de concurso público (antigua suspensión de pagos) bajo la Ley de Insolvencia. La conmoción fue ayer total en la plantilla.

«Esperábamos que ocurriera el viernes, pero se han adelantado. De momento, mantenemos nuestras protestas y seguiremos en la fábrica, trabajando hasta que no haya materia prima. La fábrica es nuestra y tiene futuro», declaró a EL MUNDO el presidente del comité, Antonio Pina (CCOO).

Antes de presentar su solicitud, DASE dice que ha obtenido «el compromiso» de su matriz y propietaria Delphi Automotive Systems Holding Inc. (DASHI) de proporcionarle «fondos adicionales con el propósito de abonar las indemnizaciones a las que los trabajadores de la planta de Puerto Real tienen legalmente derecho».

Un portavoz de la compañía informó ayer que la provisión de fondos estimada para ésa y otras contingencias comunes asciende a 70 millones de dólares, así como que la matriz DASHI «no tiene obligación de hacerlo, pero está dispuesta a proveer de fondos para mantener el curso ordinario del negocio y satisfacer los derechos de DASE bajo la ley española. Se trata de garantizar los derechos de los trabajadores», indicó.

El siguiente paso ahora es que el juez de lo mercantil gaditano encargado del caso acepte o no el procedimiento concursal. En este momento, DASE entraría en un proceso de quiebra. Delphi ignoraba ayer si los pagos y nóminas de los 1.575 trabajadores se verán afectados, «porque dependerá de la fecha en la cual sea aceptado el concurso y de las acciones que tomen el juez y los administradores concursales» correspondientes.

La compañía tampoco quiso pronunciarse ayer sobre si habrá o no «un plan social» para los trabajadores. «Si se presenta un expediente de regulación de empleo, esa decisión deberá ser tomada en el entorno de un procedimiento legal, atentos siempre al juez y a los administradores judiciales», indicaron desde Estados Unidos.

La Junta se persona

El portavoz de Delphi España dijo que la decisión se ha tomado «ante la situación de inminente insolvencia». DASE informó por la mañana de este hecho a las autoridades competentes, sindicatos y demás partes implicadas, lo que explica que, tras las reunión semanal del Consejo de Gobierno andaluz, el titular de la Presidencia, Gaspar Zarrías, informara a mediodía del proceso de suspensión de pagos iniciado por Delphi. El consejero justificó la decisión de la Junta de personarse en el concurso de acreedores para poder hacer «un marcaje más directo» a la empresa y «defender mejor a los trabajadores». «Ante cualquier movimiento o maniobra procesal o financiera, la Junta va a estar ahí, haciendo un marcaje implacable para que se cumpla, punto por punto, la legalidad laboral», advirtió Zarrías.

Por su parte, el obispo de Cádiz y Ceuta, Antonio Ceballos, expresó su «profunda preocupación» por las graves consecuencias que de esa situación se puede derivar «a más de 4.000 familias» y recordó la Doctrina Social de la Iglesia sobre la primacía del hombre en la actividad económica.