JORGE IMBAQUINGO
Las personas que tienen el síndrome de Down recibirán homenaje hoy por primera vez, ya que la organización Down Syndrom International eligió esta fecha como el Día Internacional de esta afección. Madrid se sumará a la celebración.
La Fundación Síndrome de Down de Madrid abrirá hoy sus instalaciones, en Caídos de la División Azul, 21, para realizar una jornada de puertas abiertas en la que se enseñará a los interesados cómo educar y convivir con una persona que tiene el síndrome.
La fecha fue escogida para concienciar que las personas con síndrome de Down pueden integrarse en la sociedad si reciben apoyo adecuado y eficaz para desarrollar sus capacidades.
El síndrome de Down es una afección que se produce por una alteración en las células, que hace que el individuo que nace con ella tenga una serie de rasgos físicos como ojos rasgados, cierta debilidad en el tono muscular, posibles cardiopatías y discapacidad intelectual.
Esta enfermedad se puede detectar en el período del embarazo. Sin embargo, no se conocen sus causas ni hay cura. Si se da una ayuda especializada, desde los primeros meses de vida, hay posibilidades de que se minimicen sus efectos, desde los problemas físicos hasta superar varias habilidades mentales, con lo que su desarrollo puede ser una meta posible. Hay estadísticas de la Down Syndrome International que explican que por cada 800 niños uno presenta esta anomalía.
La principal labor de las organizaciones que velan por las personas que tienen este síndrome es sensibilizar a la sociedad sobre el valor de estas personas, realizar tratamientos y, sobre todo, divulgar los derechos que les asisten, entre ellos el del trabajo.
Ahora mismo, la Fundación Síndrome de Down Madrid tiene a su cargo un programa de búsqueda de empleo. Varias empresas han mostrado interés y participan activamente en estas actividades.
Esta fundación tiene una oficina de trabajo social en la que se ayuda a las familias que tienen un pariente con este síndrome. Allí se brinda información sobre esta enfermedad, se realizan diagnósticos psicológicos y se realizan «terapias de respiro» para disminuir los efectos del extremo cuidado y preocupación en el que viven padres, abuelos, hermanos, y demás familiares de un afectado por el síndrome de Down. Esta organización recibe el apoyo de la Comunidad de Madrid, y de particulares.
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