El Joventut se despide de Europa con una derrota / EL MUNDO

El DKV Joventut cerró su participación europea con una derrota ante Olympiacos, próximo rival del Tau en el playoff de cuartos de final. Sin Ricky Rubio, con Barton reapareciendo, con Rudy Fernández medio grogui por un fuerte golpe en la mandíbula, el grupo de Aíto intentó cumplir dignamente con el trámite que significaba su viaje a Atenas y, más que acierto, lo que sí ofreció fue capacidad de lucha.

Está claro que la Penya ha acabado acusando la dureza de compartir Euroliga y liga ACB, y en ambas competiciones ha mantenido en las últimas semanas una tendencia a la baja. Nada que objetar, sin embargo, al equipo verdinegro, que ha sabido plantar cara a los mejores equipos del continente y que ha vuelto a convivir en la elite europea dejando un sello de identidad propio.

Ayer, sin embargo, volvió a adolecer de acierto exterior, un lastre que acompaña al equipo en los últimos partidos. Sin triples y con escasa amenaza en el juego interior su principal argumento ofensivo fue la velocidad.

Tras once años de ausencia en la máxima competición continental, Badalona ha vuelto a vibrar con las noches mágicas europeas.El reto de Aíto es ahora volver a situar al DKV Joventut entre los cuatro mejores de la ACB y para ello deberá centrar todos sus esfuerzos en la competición doméstica. El domingo, examen contra Unicaja.

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