El Gobierno considera que el acuerdo de cielos abiertos entre la Unión Europea y Estados Unidos que fue ratificado ayer por los Estados miembros facilitará que Iberia pueda comprar otras aerolíneas europeas, según declaró ayer el secretario general de Transportes, Fernando Palao.
Según Palao, el pacto también puede dar pie a la entrada en el capital de Iberia de otras compañías aéreas comunitarias al haberse avanzado en la liberalización del sector, informa Europa Press
Palao destacó que la ratificación del pacto es una «magnífica noticia», porque España no tenía un acuerdo bilateral con EEUU y se encontraba en situación de desventaja frente a los 16 Estados miembros que sí lo habían firmado antes de que el Tribunal de Justicia los declarara ilegales. «La prueba de que el acuerdo es beneficioso», defendió «la ha dado ya la Bolsa con las subidas de Iberia en las últimas semanas y la bajada de British Airways. «Ésa es la valoración que el sector hace de las ventajas e inconvenientes para las compañías aéreas», recalcó.
«Liberalizar este sector y permitir el intercambio de capitales favorece las dos cosas, la entrada de Iberia en la propiedad de algunas compañías y, por supuesto la adquisición de Iberia por parte de otras compañías que pudieran estar interesadas».
El secretario de Transportes recordó que British Airways tiene el 10% del capital de Iberia, pero aseguró que «puede haber otras compañías» a las que interese el nicho de mercado en el que se especializa la aerolínea española, Latinoamérica. «Muchas compañías importantes podrían estar interesadas en completar su espectro de actividad a través de la adquisición de Iberia», apuntó.
Mientras tanto, crecen los rumores de potenciales interesados en entrar en el accionariado de la compañía presidida por Fernando Conte. A la terna de posibles pretendientes de British Airways, Air France y Lufthansa, se podría sumar también la de la aerolínea australiana Qantas, participada por el fondo de inversión Texas Pacific Group, según informó ayer elconfidencial.com.
No obstante, pese a que el periódico alemán Wirtschaft Woche, aseguraba ayer que Lufthansa desea entrar en la puja por Iberia, el presidente de la compañía, Wolfgang Mayrhuber, desmentía estos extremos al advertir ayer que la aerolínea alemana no tiene, de momento, ningún interés en entrar en la española, informa Efe. Mayrhuber se remitió a las declaraciones que hizo en la presentación de los resultados de 2006, cuando negó el rumor. Entonces dijo que en España Lufthansa «coopera con Spanair y que no hay motivos para modificar» esta alianza.
Por su parte, el banco de inversión Goldman Sachs restó importancia ayer a esos rumores, al considerar que la integración de Swiss en la segunda ya ocupa la atención de la aerolínea presidida por Mayrhuber. «Creemos que Lufthansa tiene las manos llenas con Swiss en estos momentos y cualquier otra adquisición sólo distraería la atención del actual proceso de integración», señaló el banco en un informe sobre Iberia recogido por Europa Press.
Por su parte, British Airways -socio financiero de Iberia y que tiene el derecho preferente de compra ante accionistas que deseen vender su participación-, indicó ayer que el acuerdo de cielos abiertos no cambiará la relación que hasta ahora mantiene con la aerolínea presida por Fernando Conte.
El presidente de la británica, Willie Walsh, aseguró ayer que la aprobación del acuerdo no modificará la relación con su socio, a pesar de los rumores que han florecido sobre un posible acercamiento, confirmaron fuentes de la británica a Europa Press.
British Airways se mostró ayer «preparada» para explotar las nuevas oportunidades de negocio que ofrece para la compañía el acuerdo entre la Unión Europea y Estados Unidos, aunque consideró que es «bastante pobre» para Reino Unido y Europa. La prioridad de la aerolínea será mover los servicios del aeropuerto de Londres-Gatwick al aeropuerto principal de Heathrow, como la ruta de Houston, con el objetivo de mejorar las conexiones para los pasajeros, según señaló su presidente, Willie Walsh.
Las otras dos compañías españolas de red, Air Europa y Spanair, eludieron hacer valoraciones a la espera de analizar el acuerdo. Fuentes de Air Europa indicaron que el acuerdo es «muy complejo» y con «muchos matices», por lo que deben estudiarlo atentamente. Por su parte, Spanair recordó que se trata de un «primer acuerdo» en el que todavía «es necesario trabajar para superar los obstáculos aún existentes».