«Es una oportunidad de oro para solucionar las cosas de verdad y para cerrar el conflicto político de una vez por todas», apuntó la abogada y miembro de la Mesa Nacional de la ilegalizada Batasuna.

También en Pamplona, Pernando Barrena ofreció ayer otro mitin para resaltar esta misma idea: «Vamos a regresar a unas instituciones de las que hemos sido expulsados antidemocráticamente».

En la capital vizcaína, Goirizelaia resaltó la importancia de que la izquierda abertzale participe en los comicios porque es en las instituciones vascas y navarras donde «se van a tomar decisiones» y a debatir de los temas referentes a la pacificación y a la normalización política y «la izquierda abertzale tiene que estar allí». «No podemos dejar que hagan las cosas sin nosotros», advirtió.

La dirigente de Batasuna insistió en la «oportunidad histórica» abierta en este momento y recordó que su formación ya ha puesto sobre la mesa una propuesta de «solución», en referencia a la creación de una autonomía política entre Euskadi y Navarra, que desgranaron el pasado 3 de marzo en el pabellón Anaitasuna de Pamplona. «Esa propuesta», matizó Goirizelaia, parte «de un marco que en estos momentos existe» -España- y que queremos «utilizar transitoriamente para ser lo que queremos ser».

El acto político de ayer en El Arenal bilbaíno bajo el lema Badator Udaberria Badator Euskal Herri Berria (Ya viene la primavera. Ya viene la nueva Euskal Herria) se articuló como una pequeña antesala del que preparan en el BEC para el próximo sábado, 31 de marzo, donde está previsto que Batasuna dé a conocer la fórmula que empleará para hacer realidad su deseo de acudir a las elecciones.

En el de ayer, la también miembro de Batasuna, Zuriñe Zorrozua y posible cabeza de una de las listas que preparan para Vizcaya, anunció que ya han redactado su programa electoral, al que denominó «Herri programa» en todo momento. Según informó ayer Europa Press, la izquierda abertzale ha diseñado ya 269 candidaturas para concurrir a los comicios del País Vasco y de Navarra.

Un hombre de 30 años, que responde a las iniciales L.R.A. y que es natural de Barcelona, fue detenido ayer y posteriormente puesto en libertad tras pasar a disposición judicial, después de que tratara de acceder a la habitación del Hospital de San Sebastián donde está ingresado el preso de ETA Ignacio de Juana Chaos, con la intención de arrojarle un bote lleno de pintura roja. La acción fue impedida por los dos agentes de la Ertzaintza que le custodian.