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| Con el conocimiento se acrecientan las dudas (J. W. Goethe) |
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| 'Shopping' / Bares |
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| De copas y camisetas |
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ESTELA PRADANOS
Copas, música, chapas, gorras, latas, cuadros y camisetas. Es lo que muchos bares y locales de copas madrileños, algunos de ellos míticos, ofrecen a sus parroquianos. El merchandising no es sólo cosa de las grandes bandas que giran. También las salas más punteras se apuntan a dejar su impronta en camisetas, lienzos y hasta en bebidas. Comenzamos en un referente de los aperitivos domingueros: El Bonano. Es famoso entre los fieles de este garito una ilustración que muestra los diferentes tipos y tamaños de un pecho femenino. Pero ahora mismo, sus paredes acogen también la obra del artista Manuel Pastor Fernández, cuyos lienzos de los cliks de Playmobil se pueden adquirir en el propio local (entre 200 y 250 euros). El Bonano celebró el pasado año su primera década. «Ya llevamos 10 años dando caña», dicen Javier y Carlos, al frente de la barra y testigos de todo lo que se cuece cada día en este bar de La Latina. Con ese motivo se crearon una serie de camisetas con un logo que reza: «Me pongo un 10», pero también tienen gorras y ahora preparan más con logos nuevos. «Comenzamos haciendo merchandising porque forma parte de toda nuestra actividad, hay que renovarse siempre y conseguir que se hable de ti». No muy lejos de allí se encuentra otro local mucho más nuevo pero con una clientela igual de fiel. «Los domingos por la tarde esto parece un after», dicen quienes lo frecuentan. Se llama La Feúcha y está regentado por los hermanos Nacho y Ali Cánovas. Sus paredes de colores chillones acogen un montón de carteles de cine y, además de buena música, La Feúcha ofrece camisetas con el logo diseñado por Alex Muñoz, uno de los Dj del local, en dos colores: amarillo y plata. «Empezamos haciendo camisetas cuando cumplimos un año, por emular a los bares rockeros de Malasaña», dice Ali. En ese barrio se encuentra TupperWare que, más que un bar, parece un museo ya que miles de objetos kitsch decoran cada rincón. A los treintañeros a lo mejor se les salta alguna lagrimita al ver estratégicamente colocados los libros de Puck y Los Cinco, o figuras de Calimero, el tocador de la Nancy, muñecos de Star Trek o chapas de Enrique y Ana. Los hermanos del Amo abrieron este bar hace 13 años, momento en el cual esta estética no estaba todavía de moda. Ahora no sólo están a la última sino que, además, son pioneros del estilo kitsch-retro para los bares de copas, un estilo que plasman también en sus camisetas con el logo diseñado por Pablo de la Cruz, unas camisetas que «recorren todo el mundo», comenta Eva del Amo, «porque vienen un montón de guiris que se las llevan hasta por tandas». El Tupper es referencia clave en todas las guías madrileñas porque la música es estupenda. Es fijo en la mesa del Dj Adrián López, y entre él y Eva diseñan tanto los flyers, como las camisetas, y ahora también los dibujos de una bebida energética personalizada que puede adquirirse únicamente allí y convertirse en un elemento más de decoración. El Moby Dick es una sala con una programación a la última. The Strokes, The Wedding Present o la antigua banda de Pete Doherty, The Libertines, han tocado en esta sala. Cada vez que hay concierto se pone a la venta el merchandising propio de la banda en cuestión así como sus CD, pero también tienen dos modelos propios de camisetas en blanco y negro para chico y chica con el logo de la ballena, típico de este local. Un lugar cargado de «sonidos independientes del mejor rock de ayer y hoy», ésta es la constante del Wild Thing en palabras de uno de sus dueños, Carlos de Mora. Una de sus señas de identidad se encuentra en las propias paredes del local, que cobijan portadas de discos y carteles de conciertos míticos. Por eso ahora Black Sun se ha encargado de reproducir esas mismas paredes en lienzos de varios tamaños, que venden allí mismo. También se pueden comprar las camisetas con el logo del bar y de grupos como Seine o Stay. Pero este bar es conocido además por poseer su propio sello discográfico mediante el cual «apoyamos a grupos noveles como Starter, The Pauls o Less», dice Carlos. Además han sacado un par de CD recopilatorios con motivo de su 12 y 14 aniversario con temas de Paul Weller, Deluxe, Stereophonics o Brighton 64. Desde el primer año, apostaron por el merchandising porque «en aquel momento no había mucha gente que lo hiciese y creamos también las pegatinas, para que todo el conjunto nos otorgase unas señas propias de identidad». Quien no se haya pasado todavía por el ContraClub, se está perdiendo uno de los sitios más in de la capital. Frecuentado por actores y cineastas, el ContraClub cuenta con una programación musical que engloba desde conciertos en formato acústico, hasta flamenco o fusión. Además, venden camisetas para chico y chica en varios colores. Y acabamos en la más veterana, la mítica El Sol. Poco se puede decir de ella que no se sepa ya. Vio nacer a grupos como Nacha Pop y es un espacio abierto a todo tipo de celebraciones culturales. Comenzaron haciendo merchandising en forma de camiseta allá por 1979, año en que se inauguró la sala y desde entonces no han parado porque, como dice Marcela, responsable de prensa de la sala El Sol, «todo el mundo nos las pide».
DONDE
El Bonano. Plaza del Humilladero, 4. Tel: 913 66 68 86. La Feúcha. Calatrava, 12. TupperWare. Corredera Alta de San Pablo, 26. Moby Dick. Avda. del Brasil, 7. Tel: 915 97 48 11. Wild Thing Bar. Martín Machio, 2. Tel: 915 19 26 36. ContraClub. Bailén, 16. Tel: 913 65 55 45. El Sol. Jardines, 3. Tel: 915 32 64 90.
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