Odriozola reveló ayer que Barcelona ofrecerá una serie de viviendas de titularidad pública para alojar a los atletas y los miembros de la Federación Internacional de Atletismo durante la celebración de este evento, aunque, en principio, éstos iban a alojarse en hoteles, tal y como ya sucedió en el caso de los Mundiales de Natación celebrados en 2003. Un giro estratégico que supone a su vez un guiño a los Juegos Olímpicos del 92, considerados todavía hoy en día por muchos como los mejores de la era moderna. Entonces, los deportistas se alojaron en la Vila Olímpica del barrio de Poblenou. En caso de ganar la candidatura barcelonesa, su alojamiento se encontraría mucho más cerca del recinto donde se celebrarían las pruebas deportivas.

Contraoferta. Esta propuesta, que, según Odriozola, será introducida por escrito a las nueve de la mañana, poco antes de que Barcelona inicie la defensa de su candidatura, tiene como objetivo contrarrestar tanto la oferta de la ciudad australiana de Brisbane como la de Daegu, de Corea del Sur, que ya incluían en su planificación la construcción de una villa destinada a alojar a los atletas.El presidente de la Federación Española de Atletismo aseguró que se utilizarían «viviendas de titularidad pública». La modificación del Pla General Metropolità para la transformación urbanística del barrio de la Marina ya preveía que 5.161 de las 10.865 viviendas previstas se destinarían a suelo protegido o concertado.

El remozado barrio de la Marina, delimitado por las calles del Foc, Motors, Metal·lúrgia y el paseo de la Zona Franca, contará con edificos con una media de planta baja más seis pisos, mientras que los cercanos al paseo contarán con entre nueve y 14 plantas.Asimismo, el plan preveía 11 hectáreas para equipamientos, entre ellos una comisaria de los Mossos d'Esquadra, un centro universitario y un mercado. Sus comunicaciones, además, se reforzarán con la nueva línea 9 del metro y la prolongación de la línea 2.

Todo un as en la manga que ha salido a la luz antes de tiempo de la mano de un Odriozola que se mostró escéptico ante los golpes de efecto que pueden presentar las ciudades rivales de Barcelona.Moscú, por ejemplo, podría ofrecer la posibilidad de que un banco aportara 30 millones de dólares en concepto de patrocinio.

«Los rusos han ofrecido el oro de Moscú, dicen que un banco va a presentar 30 millones de dólares, pero yo también puedo decir ahora que tengo otro banco que ofrece 50; por eso este tipo de cosas habría que presentarlas por escrito», aseguró en declaraciones a la agencia Efe. También se despachó a gusto con Daegu. «No tiene atletismo. Y en cuanto a llenar el estadio, podría hacerlo con niños o con militares», agregó, aunque admitió que los coreanos podrían aportar la firma Samsung como patrocinador. La única candidatura que tal vez le quita el sueño es la de Brisbane.«Tiene tradición, atletismo y gente entusiasta, al estilo de Barcelona», señaló Odriozola.

La delegación que defenderá la candidatura de Barcelona cuenta entre sus miembros con el propio Odriozola, el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, el concejal de Deportes del Ayuntamiento, Pere Alcober, el director de promoción deportiva de la Generalitat de Cataluña, Manel Ibern, y el presidente de la Federación Catalana de Atletismo, Romà Cuyàs, así como con los atletas Marta Domínguez y Mohamed Elbendir, el ex deportista Fermín Cacho y la modelo Judit Mascó.Esta última será la encargada de presentar los argumentos de la apuesta barcelonesa.

Barcelona no tuvo suerte en el sorteo. Será la primera en poner en liza sus puntos fuertes. Le seguirá Brisbane, Moscú será la tercera y Daegu cerrará la ronda. Alrededor de las 14.00 horas, los miembros de la Federación Internacional de Atletismo encargados de valorar las diferentes propuestas emitirán su dictamen. En caso de no ser elegida, Barcelona competirá otra vez, según revelaba ayer Hereu.