C. S.
MADRID.-
Las acciones de Endesa que controla el Gobierno no serán para el grupo alemán E.ON, según confirmó ayer oficialmente sin dar ninguna explicación. La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (Sepi), adscrita al Ministerio de Hacienda, posee un 2,95% de las acciones de Endesa y la venta a E.ON habría supuesto unas plusvalías al erario público superiores a los 850 millones de euros al proceder de un paquete mantenido desde 1998.
Con su actitud, el grupo alemán sabe que tiene ya de oponentes al 49% del capital: Enel (24,9%), Acciona (21%) y la Sepi.
El comunicado oficial emitido ayer por la Sepi se limita a dar cuenta de su acuerdo de ayer en el consejo de administración de «no acudir a la OPA presentada por E.ON sobre ENDESA y cuyo plazo de aceptación termina el 3 de abril de 2007».
El presidente de la Sepi es Enrique Martínez-Robles y entre los miembros del consejo figuran el secretario de Estado de Economía, David Vegara, el secretario general de la Energía, Ignasi Nieto, y el subsecretario del Ministerio de la Presidencia en Moncloa, Luis Herrero.
Fuentes oficiales de la Sepi declinaron facilitar a este diario los motivos de la decisión. Martínez Robles declaró el 16 de marzo de 2006 a este diario que el objetivo de la Sepi era «vender», «A la hora de decidir lo haremos únicamente bajo la óptica profesional», afirmó. ¿Sin tener en cuenta la españolidad? «Ese es un tema en que no me corresponde a mí hacer consideraciones», declaró entonces.
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