Como José Luis Rodríguez Zapatero no desconvoque, se va a encontrar en la puerta de La Moncloa a los 62 ciudadanos que el martes por la noche se quedaron sin intervenir en el programa Tengo una pregunta para usted.
Porque la mayoría de los que no pudieron preguntarle en el plató de televisión se ha tomado al pie de la letra su invitación para seguir conversando, con un café, en la residencia palaciega. Pero cuidado, que también están pensando en apuntarse varios que, en teoría, habían quedado respondidos. Algunos comentaban ayer, con igual insatisfacción, que el presidente del Gobierno les «ha defraudado bastante» porque les «ha toreado» y «se ha ido por las ramas».
«Es muy bueno esquivando. Habló mucho y dijo poco. No nos esperábamos algo así. Nosotros queríamos una conversación, no una rueda de prensa. Buscábamos una charla de bar e hizo un discurso como de contestarle a la oposición, como del Congreso». Habla Pedro David Pérez, abogado malagueño de 29 años, votante del PP, que, con una pregunta-condena sobre De Juana, fue el segundo en intervenir en el programa.
La primera había sido Virginia Martín Delgado, una organizadora de eventos de la misma edad y votante del PSOE que dijo en directo sentirse «engañada, indignada y avergonzada» de un presidente que «es capaz de sentarse con unos asesinos para dialogar». Con amigos como Virginia, quién necesita enemigos.
«Pues no sé si le voy a volver a votar en las próximas elecciones», reconocía al finalizar la emisión. «Es que ha dado carpetazo a todos los temas y no ha entrado a profundizar. Mucha paja». ¿Qué nota le pone al presidente del Gobierno esta joven madrileña que de pequeña iba con escolta al colegio?: «Le veo muy verde, aún le falta mucho, aunque llevaba bien preparados los temas de economía».
«Zapatero ha estado muy torero, capeando las respuestas», consideraba Juan José Pérez Pons, el jefe de estudios separado y con dos hijos procedente de Palma de Mallorca que le preguntó que para cuándo iba a abordarse la pobreza como un tema de Estado.
La misma expresión -torear- la utilizó Jesús Bermejo Manso, agricultor segoviano conocido por ser el autor de la pregunta más original («¿Qué se puede hacer con el cultivo de la remolacha?»).
«Yo ya he dicho que la sociedad estaba desvinculada de la política», sostenía Ricardo Almenar, consultor valenciano de 46 años.
En representación de los mudos, se quejó Eduardo Arroyo: «Hemos perdido un día. Yo le he pedido al presidente que se comprometa a responder a mi pregunta sobre energías fotovoltaicas. A ver si es verdad. Habrá que ir a La Moncloa».
Hasta Lorenzo Milá, el moderador del espacio, lamentó que Zapatero no hiciera «un discurso menos previsible» y más cercano a los ciudadanos, según señaló a Europa Press.