Si lo que se está viendo estos días es sólo la esgrima que precede a una negociación, las posturas están quedando bien claras y no parece que ninguna parte vaya a ceder.
Los flirteos de Roberto de Assis, hermano y representante de Ronaldinho, con el Milan, y sus controvertidas declaraciones -en Italia se han interpretado en el sentido de que en 15 días será jugador rossonero, en Barcelona no se ha sabido explicar qué ocurrirá en ese misterioso plazo- no alteran por el momento al club.
La directiva barcelonista ni siquiera se ha planteado mejorar el contrato del astro brasileño, que finaliza en 2010. Así lo comunicaron fuentes del club a este diario. «No hay la menor duda sobre la continuidad de Ronaldinho», explicó esta fuente, que añadió que el contacto con Roberto de Assis es continuo y la relación con él «muy fluida».
El club cierra así la puerta a una renovación que parece ser lo único que tranquilizaría al barcelonismo definitivamente y arrancaría en Ronaldinho una sentencia contundente respecto a su continuidad. La tozudez del Milan y las dudas respecto a la continuidad de Rijkaard alimentan los temores de la afición, que ha visto con sorpresa cómo su niño mimado variaba su discurso en los últimos días. Así, Ronaldinho ha pasado del «estoy muy feliz» a «espero que todo se arregle pronto». La reacción del club indica que no hay nada que arreglar y que Galliani no es más que un charlatán.
Para añadir morbo a la situación, el hermano de Ronaldinho se dejó ayer ver por el Camp Nou. En el refranero barcelonista, es bien sabido que «cuando Roberto de Assis aparece en el Camp Nou, tiemblan las oficinas», por lo que su visita despertó gran expectación entre los medios de comunicación.
Sin embargo, De Assis se limitó a manifestar que no había nada que hablar respecto a su contrato y trató de matizar sin éxito sus declaraciones. «Lo que dije es que estoy harto de responder las mismas preguntas y que en dos semanas volvíamos a hablar», acertó a declarar. Lo que parece meridianamente claro es que el representante de Ronaldinho tratará de mejorar la ficha de su hermano aprovechando el desaforado amor que despierta Ronaldinho en Milan. Tal vez por eso, De Assis dijo que no descarta una reunión inminente con el club.
Se da la circunstancia de que la última renovación, que se cerró en el verano de 2005, se firmó sin haber complacido plenamente a ninguna de las partes. El club se quedó sin su jugosa porción de los derechos de imagen del futbolista, y el contrato no se cerró hasta 2014, como apuntaban todos los indicios, sino hasta 2010, con una cláusula de 125 millones de euros. Esa renovación fue el tercer contrato que firmó Ronaldinho con el club azulgrana desde su llegada en 2003 al club.
El entrenamiento vespertino de ayer, presidido por el buen humor y las bromas -el mismo Ronaldinho mandó a Italia a Zambrotta en una discusión durante un partido de futvolley- y pocos se acordaron de que mañana mismo vuelve la Liga con la visita del Deportivo.
Gio prosiguió con la misma tendencia en la sala de prensa, cuando expresó su voluntad de cumplir su contrato, que concluye en 2008, a pesar de que el Barça busca lateral zurdo. Gio sí admitió que quiere finalizar su carrera en el Feyenoord.