DANIEL G. SASTRE / NANDO GARCIA
BARCELONA.-
El Ayuntamiento de Martorell, tras alcanzar un acuerdo con los trabajadores y los sindicatos, clasuró ayer la comisaría de la Policía Local por insalubridad, después de que los agentes denunciaran hace semanas que una plaga de pulgas había invadido las instalaciones. Los miembros del cuerpo patrullaron durante la semana pasada durante cuatro días sin los uniformes oficiales debido a esta cuestión.
Un candado en la puerta y un cartel confirmaban ayer por la tarde que se había cerrado el local, y que, hasta nueva orden, los ciudadanos que lo precisen serán atendidos en las dependencias del Ayuntamiento del municipio. Este diario contactó telefónicamente con los agentes, que se negaron a confirmar la clausura.
El Departamento de Treball de la Generalitat se puso en marcha después de que se tramitaran dos denuncias, una de ellas de la federación del sector del sindicato UGT. Por su parte, la Agència de Salut Pública del Departament de Salut ha asesorado al consistorio respecto al problema, según explicó ayer a última hora de la noche la portavoz de Salut, que añadió que se ha cerrado para que una empresa lleve a cabo la desinfección de las dependencias policiales. El portavoz de los Mossos d'Esquadra explicó ayer que han cedido dos vehículos a esta comisaría para que puedan patrullar.
La nueva comisaría prometida por el Ayuntamiento, que estará junto a la de los Mossos, no estará lista hasta 2009. De momento, y mientras atienden a los ciudadanos en el Consistorio, se facilitará a los agentes a modo de vestuarios varios módulos prefabricados que, según se les ha prometido, cumplirán las condiciones de prevención de riesgos.
El edificio donde se declaró la plaga viene siendo utilizado por la Policía Local desde hace más de 20 años, y una parte de él data del siglo XIX. Cecilio Limiñana, dirigente de la UGT, calificó ayer de «diligente» la actuación del Ayuntamiento de Martorell: «Era una situación que nos había desbordado a todos».
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