«Las modificaciones introducidas en el sistema de competición van a mejorar las dos fases de la Liga. Ganamos en estímulos», reflexionó Antonio Martín, director de la sección de baloncesto del Real Madrid. El presidente del Tau opinó: «Salimos beneficiados con este cambio de modelo. La Liga adquirirá mayor dramatismo en todas sus etapas». «Las modificaciones provocarán mayor competitividad e interés. Se ha trabajado mucho para encontrar un buen sistema, y éste lo es», en palabras de Jaume Ferrer, llegado desde Camp Barça. Para Manuel Llorente, hombre del Pamesa: «Hemos analizado todas las posibilidades pensando en el aficionado, tanto el que asiste a las canchas como el espectador. Se incrementa la intensidad de la Liga regular y la agitación del play-off». «Menos partidos, más emoción», cierra Juan Manuel Rodríguez (Unicaja).
Cinco hombres, los cinco grandes clubes considerando la mezcla presupuesto-tradición-poder, cinco horas que cambiaron el baloncesto. A las 15.30 horas, en Alicante, durante la segunda jornada del V Congreso, los 18 clubes de la ACB se sentaron alrededor de la mesa. A las 20.30 horas, después de roces, arañazos, miradas torcidas, debates intensos, oposiciones y discursos persuasivos, hubo acuerdo.
A partir de la próxima temporada, la Liga regular tendrá un premio jugoso, contra el descafeinado que se sirve en los tiempos actuales. Los dos primeros clasificados accederán directos a la Euroliga, la competición europea de referencia. Las otras dos plazas quedarán para los finalistas o correrán a las semifinales si coincide que se presenta en esas eliminatorias el dúo de cabeza tras las 34 jornadas iniciales. Por ahí, gana la primera mitad (seis meses) de competición. Por detrás, la lucha por el título se acelera.
Debate.
Las rondas de cuartos de final y de semifinales se abrevian. Pasan de cinco duelos presentes a tres para el futuro inmediato. La final mantiene, no obstante, su marca de identidad, y seguirá disputándose al mejor de cinco choques.
Revolución incruenta, a medio camino entre la supresión de los play-offs, como pretendía una parte minoritaria del Congreso, y el mantenimiento del estatus, invalidado por datos que cuestionaban su repercusión, especialmente televisiva. Desde el próximo curso, la pugna por el liderato adquiere un valor palpable, además del honorífico.
Desde el triunfo de España en el Mundial de Japón, a la vista de las espectaculares cifras de seguimiento que arrastra la selección, se intensificó el debate sobre la necesidad de cambiar el sistema. A lo largo de estos meses, se han realizado estudios de mercado que avalaban el modelo vigente. En un estudio encargado a la empresa Carat, el 56% de los entrevistados, representativos de un universo de 38 millones de ciudadanos, apoyaban a ojos ciegos la estabilidad. La cúpula de la ACB defendía esa mayoría escasa, sin embargo, los clubes impusieron su opinión. La decisión, adoptada ayer, será elevada hoy a la Asamblea, que debe aprobarla por una mayoría del 80%, es decir, con el consentimiento de 15 de las 18 entidades.
No parece previsible la sorpresa, según fuentes de la asociación. No obstante, el proceso tiene recorrido más allá de Alicante. Eduardo Portela, presidente de la patronal, transmitirá la postura a la ULEB (promotora de la Euroliga), para que altere su programa. El problema surge porque Unicaja y Tau se aseguraron la pasada campaña su participación en el torneo europeo durante dos temporadas. De negarse la ULEB, hasta 2008-2009 sólo se asignaría una plaza de Euroliga para el líder de la fase regular y otra para el campeón. Lo previsible es que la ULEB, una idea impulsada por el propio Portela, asuma la decisión de su asociado español, aunque su rumbo iba en otra dirección: aumentar los clubes con plaza garantizada. La medida que saldrá del V Congreso de la ACB va en la dirección contraria, de fortalecer la incertidumbre, que en deporte se traduce en espectáculo.
EL ANTES
Fase regular. Los cuatro primeros se garantizaban disputar el quinto partido de desempate de 'playoff' en su cancha. El líder tenía esa seguridad hasta la final.
'Play-off'. Al mejor de cinco encuentros. Los finalistas y los semifinalistas jugaban la Euroliga, siempre que no quedase por detrás alguno de los dos equipos fijos en Europa por tres años.
EL DESPUÉS
Fase regular. Los dos primeros de la fase regular juegan la Euroliga.
'Play-off'. Al mejor de tres partidos en cuartos y en semifinales. Se mantiene a cinco la final. Los finalistas y los semifinalistas acceden a la Euroliga si no se queda rezagado ninguno del dúo de cabeza en la fase regular.
