Sábado, 31 de marzo de 2007. Año: XVIII. Numero: 6313.
ÚLTIMAS NOTICIAS TU CORREO SUPLEMENTOS SERVICIOS MULTIMEDIA CHARLAS TIENDA LOTERÍAS
Primera
Opinión
España
Mundo
Economía
Motor
Deportes
Cultura
Comunicación
Última
Índice del día
Búsqueda
 Edición local 
M2
Catalunya
Baleares
 Servicios 
Traductor
Televisión
Resumen
 de prensa
Hemeroteca
Titulares
 por correo
 Suplementos
Magazine
Crónica
El Cultural
Su Vivienda
Nueva Economía
Motor
Viajes
Salud
Aula
Ariadna
Metrópoli
 Ayuda 
Mapa del sitio
Preguntas
 frecuentes
Lo mejor para ser engañado es considerarse más listo que los demás (La Rochefoucauld)
Haz Click Aquí
 MUNDO
EEUU exige a Riad que aclare las críticas del rey saudí a la «ocupación ilegal» de Irak
Cinco años después de su difusión, el primer ministro israelí, Ehud Olmert, reconoce que el plan de paz árabe supone un «cambio revolucionario», aunque sigue sin aceptarlo
JAVIER ESPINOSA. Enviado especial

RIAD.- El distanciamiento entre EEUU y Arabia Saudí que habían percibido los analistas regionales se confirmó ayer después de que Washington exigiera una «aclaración» a Riad por el comentario del rey Abdala sobre el carácter «ilegal» de la ocupación de Irak.

Publicidad
La propia secretaria de Estado de EEUU, Condoleezza Rice, telefoneó al embajador del país árabe en su país para discutir las palabras del monarca y otro alto responsable norteamericano tenía previsto contactar con el titular de Exteriores saudí, el príncipe Saud Faysal, por el mismo motivo.

El número tres del departamento de Estado, Nicholas Burns, dijo el jueves que Washington se vio «sorprendido» por las críticas saudíes y la portavoz de la Casa Blanca, Dana Perino, reconoció que «en cualquier relación hay altibajos», aunque afirmó que esta situación «no interrumpirá el buen trabajo que hemos mantenido con Arabia Saudí».

Según The Washington Post, Abdula ha cancelado una cena en su honor que pretendía organizar el presidente George W. Bush en abril certificando así la crisis en las relaciones de ambos países.

La iniciativa diplomática saudí que desembocó en la creación de un Gobierno palestino de unidad nacional, cuyo primer ministro sigue siendo Ismail Haniya -miembro de Hamas- ya provocó un claro resquemor en Washington, alineado firmemente con la posición israelí, que predica un total boicot a cualquier gabinete que incluya a miembros de esa agrupación islamista. Días después, Abdala se desmarcaba de nuevo de la postura estadounidense al acoger con gran publicidad al líder iraní, Mahmud Ahmadineyad, en Riad.

Numerosos columnistas de la prensa regional han multiplicado sus críticas contra los continuos viajes de Condoleeza Rice, que se han saldado siempre sin resultado alguno. «Ahora, con el presidente Bush contra las cuerdas, su Administración en pedazos, los problemas del Ejército americano en Irak y la credibilidad de Washington destrozada en la región y en todo el mundo, nos exigen de nuevo que creamos que [Rice] pretende dedicar el tiempo que le queda a asegurar la creación de un Estado palestino. ¿Nos toma por robots idiotas? ¿Por otra generación de árabes incapaces que no tienen otra opción que asentir dócilmente a cada iniciativa israelí-americana por insultante que sea?», escribía recientemente Rami Khouri, comentarista libanés.

Finalmente, y como aseguraba ayer el analista Walid Choucair en diario Al Hayat, las declaraciones surgidas de la cumbre de Riad parecen indicar un significativo giro en la postura de todo el bloque árabe, que ahora busca «recuperar su capacidad de decisión» tras más de «dos décadas de apatía» y «complacencia hacia la política regional de EEUU». Tal cambio de actitud «llevará por supuesto a una confrontación con la posición americana sobre la causa palestina y su propia política en el área, construida sobre el apoyo a Israel», añadía Choucair.

«Ideas interesantes»

Precisamente, el primer ministro israelí, Ehud Olmert, se pronunció ayer en términos laudatorios sobre la convocatoria de Riad y dijo que supone «un cambio revolucionario» en la política de los países árabes hacia Tel Aviv.

En una serie de entrevistas con la prensa israelí, Olmert precisó que el plan de paz reactivado por la Liga Arabe «difiere» del que se adoptó en 2002 «porque no habla para nada de la resolución 194» de Naciones Unidas, que exige el regreso de los refugiados palestinos a sus hogares.

El titular del Ejecutivo israelí mantuvo que la iniciativa saudí contiene «ideas interesantes» y mostró su disposición «a discutir» con esa nación árabe tal proyecto, que sin embargo rechazó, especialmente porque sigue aferrado a la idea de no aceptar ni un solo refugiado palestino.

Por su parte, el jefe del Gobierno palestino, Ismail Haniya, advirtió de que si israelíes, norteamericanos y la Unión Europea no modifican su boicot al nuevo Ejecutivo en los próximos tres meses Hamas, podría replantearse su actitud actual y «abrir otras opciones para proteger los intereses nacionales».

recomendar el artículo
portada de los lectores
copia para imprimir
Información gratuita actualizada las 24 h.
 SUSCRIBASE A
Más información
Renovar/Ampliar
Estado suscripción
Suscríbase aquí
Suscripción en papel
  Participación
Debates
Charlas
Encuentros digitales
Correo
PUBLICIDAD HACEMOS ESTO... MAPA DEL SITIO PREGUNTAS FRECUENTES

elmundo.es como página de inicio
Cómo suscribirse gratis al canal | Añadir la barra lateral al netscape 6+ o mozilla
Otras publicaciones de Unidad Editorial: Yo dona | La Aventura de la Historia | Descubrir el Arte | Siete Leguas

© Mundinteractivos, S.A. / Política de privacidad