El concurso es una adaptación de Are you smarter than a 5th grader?, que examina a los adultos y acaba, en gran parte de los casos, poniendo al descubierto todo lo que han olvidado a lo largo de los años. Cuestiones como ¿cuáles son los colores del arco iris?, ¿cuál es el pico más alto de la península? o ¿quién fue Recaredo? pueden poner en apuros a más de uno, y de eso se trata.

Para los atrevidos concursantes será como volver al colegio, de ahí que el plató esté ambientado en un aula radicional. Participan de uno en uno y el examen que deben pasar ante las cámaras consta de 10 preguntas, cada una de ellas referidas a una de las materias que se estudian desde primero a quinto.

Si el concursante logra responder correctamente todas y cada de las preguntas, se le plantea una última valorada en un millón de dólares (760.000 euros). Eso es en Estados Unidos, aquí todavía está por determinar la cuantía de los premios, pero no estarán muy alejados de los otorgados por el programa original.

Antes de esa última cuestión del millón de dólares, se van recompensando todas las demás, de la una a la 10, con premios que se van incrementando en cada una de ellas. En el programa de la Fox se empieza pagando 1.000 dólares (unos 760 euros) por la primera y se termina con una bolsa de 500.000 dólares (379.000 euros) para la décima pregunta.

Como suele ser tradicional en muchos concursos de estas características, el participante puede contar con ayuda de alguien. En esta ocasión no será ni su mejor amigo ni su mujer ni su compañero de mus, la novedad es que se trata de un niño, que sí tiene frescos esos conocimientos.

Nada más abrir el programa el presentador, el concursante puede elegir a su ayudante de entre un grupo de cinco alumnos, previamente seleccionados por el espacio. A partir de ese momento, se sentará junto al concursante en un atril, listo para el quite, si así se le solicita, dentro de unas rigurosas reglas preestablecidas.

Esas normas vinculan a los alumnos-ayudantes con los tres comodines de los que dispone el adulto. Sólo podrá utilizar una vez cada uno de ellos, que tienen diferentes grados de ayuda. El primero puede salvarle la cara si yerra una respuesta, al permitir a su ayudante proporcionarle la correcta y continuar adelante. El segundo y tercero tienen una función muy similar, contrastar la respuesta antes de lanzarla al aire.

El concursante tiene la posibilidad de decir ¡hasta aquí hemos llegado! y retirarse del programa llevándose el dinero acumulado hasta ese momento. Pero no será tan fácil. Antes de abandonar el plató está obligado a mirar a la cámara, que es como mirar a todos y cada uno de los telespectadores, y reconocer: «No soy más listo que un niño de quinto curso».

La FOX, cadena a la que Antena 3 ha comprado los derechos de emisión, estrenó el concurso en horario estelar el pasado 27 de febrero con gran éxito de audiencia. El espacio fue visto por más de 26 millones de telespectadores, con una cuota de pantalla del 22%, casi el doble de la media de la cadena, situada en el 12%. El espacio se ha situado, por tanto, en los niveles de audiencia de series de gran éxito y plenamente consolidadas como CSI y House.

El concurso no sólo ha marcado un hito en la historia de la FOX, sino en la de la televisión estadounidense, al convertirse en el estreno más visto en el país desde el año 1998.