Los jugadores de fútbol siempre se protegen los genitales ante el lanzamiento de una falta. Los manuales de defensa personal recogen la patada en los testículos como una estrategia eficaz para escapar de un agresor. ¿Por qué son tan dolorosos los golpes en esta zona? El doctor Carlos Hernández, jefe de urología del hospital Gregorio Marañón de Madrid, indica que «se trata de un órgano fundamental para la reproducción que tiene muchas terminaciones nerviosas, muchas más que otras partes del cuerpo, lo que explica su gran sensibilidad». Además «el pene y los testículos tienen la particularidad de que se encuentran en el exterior del cuerpo y, por lo tanto, no están tan protegidos como, por ejemplo, el cerebro».
El dolor producido depende de la intensidad del golpe y de lo directo que sea, pero se caracteriza por ser «muy intenso y brusco, hasta el punto de que a veces puede provocar un desmayo», señala Hernández. En cuanto a la duración del dolor, este especialista afirma que «si es un golpe sin mayores consecuencias disminuirá a las 24 horas y las molestias se pasarán por completo en tres o cuatro días».
Las consecuencias de una patada en los genitales masculinos son diversas. Antonio Martín Morales, del hospital Carlos Haya de Málaga, explica que «pueden ir desde una ligera inflamación hasta la rotura de un testículo que, incluso, se puede perder en los casos más graves». El doctor Octavio Arango, del hospital del Mar en Barcelona, añade que además de los testículos pueden lesionarse los órganos vecinos como «el pene y la uretra».
En un hospital grande, las consultas en urgencias por traumatismos genitales rondan las 15 anuales, a una media de una o dos por mes, indican estos expertos. / ISABEL F. LANTIGUA
|