CARMEN LLORENTE
Tiempos felices para ACS. La empresa presidida por Florentino Pérez conquistó ayer un nuevo máximo histórico en 46,8 euros por título, con lo que alcanza ya una capitalización de más de 16.500 millones de euros, tras acumular una ganancia del 6% en la última semana. La fiebre energética que vive en las últimas semanas la Bolsa española ha aumentado el atractivo de la constructora, que tiene la llave accionarial en Unión Fenosa, donde controla el 40% del capital y controla una participación del 13% en Iberdrola, la segunda eléctrica española. Pero además, los inversores han premiado su reciente incursión en el mercado alemán.
ACS compró el pasado día 21 de marzo una participación del 25,1% de Hochtief, el mayor grupo constructor alemán. Esta adquisición ya se ha interpretado en el mercado español y germano como un primer paso antes de lanzar un Oferta Pública de Adquisición (OPA) por el 100% de la compañía.
Ante esta expectativa, las acciones de Hochtief se han disparado un 20% en las dos últimas semanas. En otras palabras, además de una compra estratégica, ACS ha realizado ya una importante inversión financiera. Ayer, la constructora alemana cerró a 80 euros por título, un 11% más que los 72 euros pagados por la compañía española, con lo que acumula ya unas plusvalías de 140 millones.
Los analistas creen que ACS seguirá la misma estrategia que utilizó con Dragados. En la primavera de 2002, la constructora compró al Banco Santander el 23,5% del capital de su competidora, con una prima del 58,5% sobre el precio de mercado. Un año y medio después se anunció la fusión de ambas compañías.
Con la perspectiva de una desaceleración del ciclo constructor en España, tras ocho años de desmesurada actividad, la entrada en Hochtief se enmarca dentro de un proceso de expansión internacional, con el que ACS dará el gran salto a mercados de Europa central.
Pero la diversificación no sólo es en el exterior. ACS está dando importantes pasos también en el sector energético -donde ya ha realizado inversiones en energías renovables-, además de las participaciones adquiridas en las eléctricas españolas. Unas inversiones que, además de ser estratégicas, están reportando también importantes plusvalías al grupo constructor y de servicios.
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