Abrió y cerró el mitin con él. El lehendakari, Juan José Ibarretxe, enarboló ayer de nuevo el plan que lleva su nombre y que el Congreso rechazó hace ya más de dos años, como la prueba evidente de que «se puede defender sin pistolas el derecho a decidir de los vascos». Pero dijo más: Ibarretxe apuntó que, en estos momentos en los que la consecución de la paz «está en el aire», la esperanza pasa por «dar la palabra al pueblo» y se comprometió, de nuevo, a realizar una consulta sobre el futuro del País Vasco.
Cuando al inicio de la anterior legislatura Ibarretxe anunció su intención de convocar un referéndum, se despertó una auténtica tormenta política en el País Vasco y en el resto de España que parecía haber menguado hasta desaparecer desde el sonoro portazo que el plan Ibarretxe recibió en las Cortes.
Sin embargo, el lehendakari aprovechó ayer su intervención en el Aberri Eguna para resucitar su olvidada propuesta de convivencia con España y, a sólo unas semanas de las elecciones, volver a poner sobre la mesa el debate en torno a su consulta.
«Hoy más que nunca, en momentos delicados, donde la consecución de la paz está en el aire, quiero que toda la sociedad vasca sepáis que sigo pensando más que nunca en que las iniciativas políticas y, en última instancia, la palabra del pueblo vasco es, fundamentalmente, el motivo de la esperanza para este país», aseguró.
«Yo, hoy, aquí, doy nuevamente mi palabra: será el pueblo vasco el que decidirá libremente su futuro», proclamó en tono solemne. «No descansaré hasta que este compromiso sea realizado», avisó.
El lehendakari advirtió a su público de que la pelota no está en el tejado de ETA ni en el del Gobierno central, tal y como, a sus ojos, se refleja «en el debate mediático». «Tengamos clara una cosa: el foco no está en ETA, ni en lo que haga el Gobierno español, sino aquí, en lo que hagamos nosotros, todos los que aquí vivimos y trabajamos en Euskadi».
Ante quienes criticaron en su día el plan Ibarretxe por simbolizar «un concepto trasnochado», se esforzó en certificar su error. Aseguró que «defender que Euskadi es una nación, porque lo es, que es nuestra patria y que queremos construirla llevándonos bien con todos los pueblos de nuestro alrededor es el concepto más moderno que hay en el siglo XXI».
Ibarretxe utilizó la actual división en materia antiterrorista que existe entre PP y PSOE -«se llevan a matar», describió- y resaltó que «sólo en una cosa se han puesto de acuerdo Zapatero y Rajoy en cuatro años, en decirle no a un acuerdo tomado por mayoría absoluta en el Parlamento Vasco» y en impedir, por tanto, «que la sociedad vasca decida libremente aquí su futuro».
«Que quede claro, en esta materia, ni un paso atrás. Nosotros vamos sobre dos vías: no a la violencia, sí al derecho a decidir. Y, si no nos desviamos de este camino, no descarrilará jamás el tren vasco», concluyó.