El primer busto de Pablo Iglesias vivió en el ostracismo desde 1939. Aquel año, los franquistas dinamitaron el gran monumento de Emiliano Barral, y unos militantes rescataron el busto durante la noche y lo enterraron en El Retiro para que no fuera descubierto.

Tuvieron que pasar 40 años para desenterrar la estatua de los jardines de Cecilio Rodríguez, ya con Franco muerto. Esa primera estatua ya tenía rota la nariz cuando se recuperó gracias a unos planos manuscritos por aquellos militantes, que guardaron durante años en la familia de Gabriel Pradal.

La de la nariz rota está actualmente -sin restaurar- en la sede del PSOE, en la calle Ferraz. En diciembre de 2001, José Luis Rodríguez Zapatero inauguró una réplica del busto en la calle de Pablo Iglesias, junto al cruce con Reina Victoria. Allí acudieron también Alfonso Guerra, Cándido Méndez y Trinidad Jiménez, entre muchos otros políticos.

El busto, ahora sin napias, reposa solitario en las inmediaciones del nuevo parque/pista de entrenamientos de golf que hay en el distrito, y ha sufrido ya más agresiones, aunque ésta es la más grave.

La anterior se produjo en septiembre del año pasado, cuando la estatua amaneció cubierta de pintadas de spray en las que llamaban al fundador del PSOE «Rojo asesino» o «Rojo traidor». Algunas letras de su nombre también fueron arrancadas.

A finales de este mes de marzo, sin embargo, alguien ha roto la nariz del busto y la ha dejado prácticamente igual que su modelo. Para arrancar la gran parte de piedra que representaba la nariz se ha debido de utilizar un objeto muy contundente, pues el corte es limpio.

La nariz ha desaparecido de los pies de la estatua. Algunos vecinos de la zona ni siquiera habían reparado en este acto vandálico.

Oscar Iglesias, portavoz del PSOE en el Ayuntamiento, cuando conoció la noticia dijo que «esto es una consecuencia más de la crispación que está generando el PP con su modelo de oposición». Iglesias relacionó el ataque a la estatua del fundador de su partido con otras agresiones cercanas: «En los últimos tiempos hemos vivido numerosos ataques a sedes de partidos políticos en nuestra región y en toda España. Hace un año, aproximadamente, la estatua de Tierno Galván sufrió un acto vandálico, después la de Pablo Iglesias... El PP debe reflexionar sobre la crispación que ha generado». Además, el portavoz socialista pidió al Ayuntamiento que reforme la estatua lo antes posible: «El Ayuntamiento es el responsable del mantenimiento del patrimonio de la ciudad y por eso le pedimos que arregle inmediatamente los desperfectos del busto».