Y es que, Simancas se mantiene fiel a su dialéctica del «tamayazo», por la que el PP, con Aguirre a la cabeza, favorece «a sus amigos los especuladores» en detrimento de los que más lo necesitan. El candidato socialista a la Presidencia de la Comunidad de Madrid se comprometió a construir 100.000 nuevas viviendas protegidas, 40.000 en alquiler y rehabilitar 180.000. Además, aseguró que todas se ajustarán a los requisitos bioclimáticos de ahorro y eficiencia energética.

Por su parte, Miguel Sebastián traía bien preparada su propuesta: bonificaciones para todos aquellos que promuevan, rehabiliten o alquilen pisos ecológicos. El aspirante a la Alcaldía se compromete a poner en marcha líneas de crédito blando a los promotores que construyan este tipo de vivienda. Por lo que respecta a la rehabilitación, si se hace con las riendas de la Casa de la Villa, pondrá en marcha ayudas del 25% del coste o de hasta 1.500 euros por vivienda. El objetivo es que adapten sus casas a los cánones medioambientales. Finalmente, planea bonificaciones de hasta el 50% en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), si la Ley de Haciendas Locales lo permite. En el caso de que no sea así, aseguró que habrá subvención.

«Madrid es la capital del despilfarro energético y hay que recordarle a Gallardón que la lucha contra el cambio climático es mucho más que hacerse fotos con Al Gore -ex aspirante demócrata a la Presidencia de Estados Unidos-», aseguró. El reto de Sebastián es incrementar la lucha contra el cambio climático. Según precisó, las emisiones de CO2 per capita de Madrid «duplican a las de Oslo y superan en un 30% a las de Barcelona».