«La emoción y el suspense son los dos grandes ingredientes de esta serie que se enfrenta al desafío de convocar ante el televisor a toda la familia», dijo ayer, Daniel Écija, creador y productor ejecutivo, en la presentación de El internado. Écija, responsable de las algunas de las ficciones españolas más importantes -Médico de familia, Periodistas, El grupo, Los Serrano, Los hombres de Paco-, afirmó que «vivimos un momento cada vez más complicado en el mundo de la ficción, ya que los estrenos tienen que hacerse un hueco en parrillas muy sólidas y competir con productos consolidados».

El internado recrea la vida de un colegio ubicado en plena naturaleza: profesores, alumnos y personal de servicio están solos, aislados en medio del campo. Allí nada es lo que parece, pocos son quienes dice ser y la verdad es mucho más complicada de lo que todos creen. Varios alumnos están marcados por la falta de afecto y por las soledad, y algunos adultos tienen un pasado que desean olvidar.

«Ésta es una apuesta muy fuerte por parte de Antena 3 y de Globomedia y buscamos la calidad absoluta en términos de artísticos y de eficacia -respuesta positiva de la audiencia-», subrayó Mikel Lejarza, director general de Antena 3 que resaltó el nivel artístico de la serie, los decorados y «una cantidad de exteriores fuera de lo normal».

Tanto Lejarza como Écija hicieron hincapié en el alto porcentaje de fracasos de series que se estrenan -en torno al 80% - , pero el productor señaló que «es hora de hacer ficciones valientes, de género y de calidad; pero sobre todo, tratando con respeto al público».

Amparo Baró, Luis Merlo, Natalia Millán, Marta Torné y Martín Rivas, son los principales intérpretes de El internado. Écija recalcó el esfuerzo que han tenido que hacer Amparo Baró y Luis Merlo para «cambiar de registro» -llegan de 7 vidas y de Aquí no hay quién viva- y pronosticó que «Martín Rivas va a ser la gran revelación».