ELENA P. CANAL
Picor de ojos, congestión nasal, hipersecrección de mucosa y estornudos podrían ser los síntomas de un catarro, pero si la infección perdura su diagnóstico puede convertirse en una alergia. Un 20% de la población madrileña padece esta enfermedad de molestos síntomas, que se traduce en 1.200.000 personas. Los madrileños son muy vulnerables al polen de gramíneas debido a la extensa vegetación de la Comunidad. Las plantas del campo y el césped pertenecen a este tipo, que «pueden viajar grandes distancias en el aire», explicó el doctor Pedro Ojeda.
La prevención de las enfermedades alérgicas, a través de un diagnóstico precoz, y la educación del paciente serán los pilares de la IV Semana de la Alergia, que se celebrará entre los días 23 y 28 de abril. Bajo el lema de Aprende a vivir bien con tu alergia las jornadas divulgarán información sobre los tipos de alergias, el diagnóstico y el tratamiento. Asimismo, pondrán al servicio del paciente un teléfono de consultas que será atendido por profesionales de la alergología. Este servicio se llevará a cabo entre el 15 de abril y 30 de junio en el número 664 366 143.
«El polen es la sustancia alérgica más extendida entre la población, afecta al 70% de los alérgicos», explicó la doctora López, presidenta de la Fundación de la Sociedad de Madrid de Alergología e Inmunología. Dentro de estas sustancias el polen más frecuente es el de gramíneas, que padece el 60% de los afectados.
Otro tipo de sustancia alérgica es la arizónica, conocida popularmente como ciprés. Ésta abunda en las urbanizaciones. En esta clasificación también se incluye el polen de plátano de sombra, muy frecuente en las aceras de la ciudad.
Según el doctor Gabriel Sosa, la segunda causa de alergia más difundida la libera el pelo de los animales. En la Comunidad un 30% de los alérgicos son sensibles a esta alergia por el gran número de mascotas que hay.
La tercera causa de alergias son los ácaros, que afectan al 17% de los alérgicos. Las personas sensibles a esta sustancia son más vulnerables en zonas húmedas. El clima seco de Madrid favorece a los afectados. Los afectados por los hongos representan un grupo impreciso por la ausencia de diagnóstico, aunque su porcentaje ronda el 7,5% de la población. El doctor Sosa se refirió al moho como uno de los más frecuentes productores de alergia. Este microorganismo «crece en la vegetación», añadió. «La alternaria, otro tipo de hongo, emite unas esporas al aire que al respirar producen una reacción alérgica», precisó el doctor.
El doctor Pedro Ojeda también expondrá sus consejos médicos en la semana de la alergia. Durante la presentación de estas jornadas centró su explicación en la importancia del diagnóstico precoz de la alergia: «Las pruebas de esta enfermedad son fiables desde las primeras semanas de vida de una persona, en contra de lo que se cree». El desconocimiento de esta afección a menudo retrasa la consulta de un alergólogo.
Contaminación
El aumento de población alérgica en los últimos años puede vincularse al incremento de emisiones de contaminación. «La contaminación ambiental hace que las plantas se estresen. Producen unas proteínas de defensa que vuelven el polen más alergénico», explicó el doctor Ojeda. Y añadió que «las partículas liberadas por los coches diésel actúan sobre el sistema inmunológico con mayor actividad».
La doctora López presentó el campamento de verano para niños asmáticos que la fundación organizará entre los días 23 y 29 de junio, en Buitrago de Lozoya. El plazo de inscripción estará abierto hasta el 15 de mayo. En este recinto se enseña a los niños a convivir con su enfermedad y a «aprender a hacer deporte», en contra de lo que se piensa.
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