De los 98 proyectos presentados, sólo otros cinco gabinetes habían sido admitidos a concurso junto a Nouvel: Zaha Hadid, de Gran Bretaña; MVRDV de Holande; y Christian de Portzamparc y Francis Soler de Francia.

Nouvel ha presentado los detalles de su proyecto, concebido como una colina de placas de acero monumental aunque, claro está, se pliega a la altura máxima de 37 metros impuesta por el Ayuntamiento de París a las nuevas construcciones.

Pierre Boulez puede comenzar a creérselo. Cuando hace dos años el ministro de Cultura, Renaud Donnedieu de Vabres, y el alcalde de París, Bertrand Delanoë, anunciaron la creación de este nuevo auditorio, el compositor y director de orquesta, que llevaba más de 20 años clamando en el desierto, comentó algo escéptico: «Me lo creeré más cuando nos acerquemos a su realización».

La colina ideada por Novel se levantará en el parque de la Villette. Estará formada por planos oblicuos de acero, superpuestos de tal forma que la gente pueda ir subiendo gradualmente por el edificio. Y se convertirá en un lugar más desde el que posar la mirada sobre el paisaje urbano de París.

La sala de conciertos está diseñada para acoger a 2.400 personas, que nunca estarán situadas a más de 38 metros del director de la orquesta. Los asientos están dispuestos alrededor de la escena y, en algunos casos, podrán estar sobre la misma.

Además, la sala puede transformarse en módulos diversos en función de los espectáculos que se presenten ya que, además de la música clásica, el nuevo auditorio también acogerá jazz y otras músicas del mundo. Aunque Nouvel habla constantemente de colinas y rocas, el interior de la gran sala parece también recrear el fondo del mar. Pero todavía no está decidido si los cimientos serán realizados también en acero o cemento.

El edificio está dividido en dos niveles principales y acogerá también salas de repetición, una biblioteca de particiones y tiendas, además de un centro educativo, diversas salas de conferencias y un centro de exposiciones.

Jean Nouvel podrá comenzar a construir en septiembre de 2009 y cuenta con un presupuesto de 200 millones de euros, que serán financiados a partes iguales por el Estado (45%) y el Consistorio de París (45%), mientras que la región de Ile-de-France aportará el 10% restante. Si todo va bien, la Orquesta Filarmónica podrá estrenar su nuevo auditorio en octubre de 2012.

Junto a la apertura de la sala Pleyel, el pasado mes de septiembre, París afirma con este ambicioso proyecto su deseo de alcanzar el estatus de capital mundial de la música.