En una entrevista a la Agència Catalana de Notícies, Duran apostó por «esperar» a ver qué dice el Tribunal Constitucional y no emitir juicios antes de la sentencia. No obstante, el secretario general de CiU reconoció que no es optimista sobre su contenido y cree que, en caso de un escenario con una sentencia negativa, todos los partidos catalanes deberían reflexionar con «la máxima unidad posible».

El líder de Unió cree que Montilla, en contra de lo que afirma el president, tiene «limitadísima su credibilidad para liderar la respuesta a una hipotética sentencia adversa al Estatut».«si ni tan siquiera es capaz de liderar ahora el proceso de defensa y despliegue del Estatut, que se aplique con rigor y con estricto cumplimiento del pacto que supuso», añadió, «cómo se puede pensar que lo haga en peores condiciones si no tan solo es capaz de presentar recursos de inconstitucionalidad ante leyes que van en contra del Estatut, tal y como estabelce el Consell Consultiu».

El líder democristiana también remarcó que Montilla «no ha sido capaz de defender la inversión pública del Estado en Cataluña o soluciones contundentes para Cercanías de Renfe o el aeropuerto de El Prat».

En otro orden de cosas, Duran insistió en situar, después de las elecciones municipales, el debate dentro de la federación nacionalista sobre la posibilidad de entrar en el Gobierno español en la próxima legislatura. Será en ese momento cuando Unió Democràtica, declaró Duran, «defenderá donde haga falta su posición respecto a lo que tiene que hacer CiU en la política española». Unió defenderá una participación que se calibrará en función de consensuar «un programa de acción de Gobierno» donde definir cuatro años de despliegue del Estatut y las inversiones en Cataluña, entre otras cosas.