El noviazgo entre el primogénito del príncipe Carlos y la princesa Diana y la bella plebeya Kate Middleton ha llegado a su fin «sin que haya un tercero en discordia», según fuentes citadas por The Times.

El anuncio de la separación fue realizado por un «amigo cercano» al príncipe que explicó a The Sun que la pareja «no ha podido soportar la extraordinaria presión» a la que había sido sometida, en particular en lo que se refiere al acoso de los paparazzi. Un claro síntoma de que esta cuestión perturbaba notablemente a Middleton fue la presentación de una protesta formal ante la Comisión de Quejas sobre la Prensa por una fotografía suya publicada por el periódico Daily Mirror en marzo.

Sin embargo, tanto The Sun, que adelantó la noticia, como la cadena BBC señalaron como principal motivo de la separación la «prioridad» que el segundo en la línea de sucesión al trono de Inglaterra ha concedido últimamente a su carrera militar. En todo caso, Clarence House ni confirmó ni desmintió la noticia. «No comentamos los asuntos relativos a la vida privada del príncipe», dijo un portavoz oficial.

Desde marzo, el príncipe Guillermo vive en Camp Bovington, en Dorset, donde se está preparando para ser comandante del Ejército británico. Debido a esta circunstancia, la pareja apenas se veía una vez a la semana, lo que habría hecho que Kate se sintiera frustrada «al darse cuenta de que su noviazgo retrocedía en lugar de avanzar», según la versión del amigo del príncipe.

El anuncio de la noticia sorprendió en medios británicos, ya que incluso se especulaba con el próximo anuncio de un compromiso oficial. Kate, plebeya, hija de una ex azafata y de un hombre de negocios que ha hecho una fortuna con una empresa dedicada a las fiestas infantiles, y el príncipe se conocieron hace unos seis años, pero son novios desde hace más de tres años, de acuerdo con las fuentes especializadas. En las Navidades pasadas Kate fue invitada formalmente a unirse a la familia real, pero declinó la oferta y prefirió quedarse con los suyos, debido a que había perdido a uno de sus abuelos hacía poco tiempo.

Los gestos cariñosos que se dedicaron en la fiesta de graduación en la academia militar de Sandhurst, en diciembre pasado, apoyaban la versión de quienes pensaban que el compromiso era inminente. Pese a todo, el príncipe Guillermo, más tímido que su hermano Harry, con más fama de gamberro, había declarado en diversas ocasiones que no tenía intención de casarse joven. Incluso en alguna ocasión se refirió al calvario que sufría toda aquella mujer que se relacionara con él. «Estas pobres chicas con las que me relaciono o son mis amigas reciben el foco de los medios y sus padres son perseguidos. Me parece injusto», comentó en una entrevista en 2003.

El precedente de su padre, que flirteó con bellísimas mujeres, hasta casarse ya casi cuarentón con Lady Di, y seguir una relación clandestina con una de sus primeras novias, Camila, ahora su esposa, puede pesar en contra de una soltería muy prolongada.

Apenas conocerse la noticia de la ruptura, no confirmada oficialmente, los medios británicos especulaban con quién robará el corazón al príncipe. Recientemente fue visto con una joven, Ana Ferreira, una estudiante de 18 años, quien podría consolar al hijo del heredero tras la ruptura. Y no faltaron quienes apuntaron a que Kate Middleton tendría una segunda oportunidad. Como Camila.