SEVILLA 0

Cañizares

Miguel

Albiol

Ayala

Moretti

Joaquín

Marchena

Hugo Viana

Silva

Villa

Morientes

Cambios: Angulo por Silva (min. 74)

Jorge López por Joaquín (min. 81) s.c.

Pallardó por Hugo Viana (min. 84) s.c.

Cobeño

Hinkel

Javi Navarro

Dragutinovic

Castedo

Alves

Maresca

Renato

Adriano

Jesús Navas

Luis Fabiano

Cambios: Puerta por Adriano (min. 58)

Martí por Jesús Navas (m. 74)

Ocio por Castedo (m. 74)

Arbitro: Clos Gómez

Tarjetas amarillas: Javi Navarro y Marchena.

Tarjetas rojas: Hinkel (min.48).

Goles: 1-0: Villa (min. 26). 2-0: Villa, de penalti (min.49)

MESTALLA. LLENO.

VALENCIA.- El Valencia se dio ayer un respiro para enterrar las dudas que le dejó en el cuerpo el Chelsea el pasado martes y recuperar así la sonrisa en el campeonato de Liga. Venció ayer ante el Sevilla, un rival directo que le tenía tomada la medida en las últimas temporadas. Esto le sirve para volver a los puestos de Champions, recortar diferencias con los de Juande, que ya están a dos puntos, y ver más de cerca al Real Madrid. Con los blancos, que quedan a un punto, se tendrá que ver las caras en el Bernabéu el próximo sábado. Otro duelo vital para meterle presión al Barça.

Un contratiempo de última hora trastocó los planes de Quique. Albelda, con exceso de líquido en la rodilla, se quedó en la grada. Otro problema que sumar a la ya de por sí deteriorada línea de mediocentros del Valencia. Hugo Viana tomó el relevo del capitán.

Ni la presencia del portugués sirvió, al menos, para que el Valencia tratara de tomar el mando del partido. Fue el Sevilla quien controló, quien jugó, quien propuso y el Valencia el que corrió detrás del balón, haciendo kilómetros y kilómetros, desgastándose. Algo parecido a lo acontecido en la amarga noche del Chelsea.

En teoría, para lo que mucho que había en juego el conjunto de Quique Sánchez Flores no daba sólo la sensación de no poder, sino que empezaba a acumular despropósitos perdiendo un balón tras otro. Le quemaba el balón.

Los andaluces, por contra, aún con importantes bajas en sus filas, demostraron tener más profundidad de banquillo. Juande Ramos hizo algunos ajustes. Alves, a quien Mestalla no le perdonó que expulsara a Silva en el Pizjuán, actuó como extremo derecho y Navas pasó a la media punta. Los dos hicieron daño, siempre mirando al frente.

El Sevilla se sentía a gusto, dominaba claramente, si bien no encontraba la última jugada, la que abriera el cerrojo valencianista. Cuando peor lo estaba pasando el cuadro local, excesivamente nerviosos e impreciso, vio la luz la primera ocasión. Fue gol.

Como no podía ser de otra manera, fue en un contragolpe. Villa asistió a Marchena, que al primer toque se inventó una magistral asistencia entre líneas. El Guaje se coló entre Javi Navarro y Dragutinovic y picó cruzado ante la salida del meta madrileño. El tanto tuvo el efecto deseado para el Valencia, que entonces sí se enchufó al partido. El Sevilla bajó de revoluciones, aunque pudo encontrar el empate en un claro penalti de Miguel sobre Jesús Navas, que había ganado en carrera a Ayala.

Maresca ejecutó la pena, pero se topó con las manos de Cañizares, que siguen cotizando al alza, y el poste derecho. El Valencia volvía a tomar aire en un tramo final del primer acto.

La reanudación empezó con el Sevilla envalentonado, aunque muy pronto se le puso el panorama negro. Lo que tardó Hinkel, a los tres minutos, en atropellar a Villa cuando el asturiano se disponía a encarar a Cobeño. Penalti a favor del Valencia (cuatro meses después) y expulsión del alemán. Villa no perdonó y firmó el segundo. El Valencia ya no sufrió más.