Las cajas de ahorro se han convertido en la principal fuente de financiación no sólo de los partidos políticos sino también de los entes territoriales (ayuntamientos, comunidades autónomas, diputaciones, cabildos, consejos...). Aunque todavía falta por llegar un tercio de los informes de Gobierno Corporativo, según los datos que han aportado las cajas más importantes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), en 2006 han otorgado operaciones crediticias por encima de los 1.500 millones de euros. Curiosamente, en sus órganos de Gobierno están sentados los representantes que ellas mismas designan (otra forma de complementar los sueldos de los políticos).
Según fuentes de la CNMV, las cajas no informan sin embargo de las condiciones (tipos y plazos) de estos créditos para evitar ofrecer ventajas competitivas a los bancos, que también les conceden préstamos. Pero no están obligados a informar públicamente. Tampoco informan de los saldos vivos de los créditos anteriores, aunque en la propia CNMV se señala que excepcionalmente algunas de estas entidades pueden incluir en el dato de 2006 préstamos anteriores.
El reparto
Las corporaciones en las que gobiernan los partidos de ámbito nacional se reparten la mayor parte de la tarta y las cajas de ámbito autónomo son las que distribuyen en mayor medida este activo entre sus partidos regionales.
Aunque se observa una cierta moderación, sobre todo desde que la CNMV les obliga a hacer público esta información, las cajas otorgan sus líneas crediticias a los partidos que gobiernan sus instituciones locales o autónomas. Así, las cajas andaluzas y extremeñas son las más proclives a facilitar créditos al PSOE; las de las comunidades valenciana, murciana, balear o de Castilla y León, al PP; y las vascas, al PNV. Resulta curiosa la práctica desaparición creditica de La Caixa que en 2005 prestó casi 80 millones de euros (50 millones al Ayuntamiento de Barcelona) y que en 2006 sólo informa de seis millones (a la Universidad Politécnica de Cataluña).
La andaluza San Fernando es la caja que lidera el ranking por volumen con 232,6 millones de euros otorgados en préstamos (hipotecarios en su mayor parte), créditos, cuentas de crédito y avales. Su principal deudor es la Junta de Andalucía, ya que esta entidad ha coordinado un préstamo sindicado de 57 millones. El Gobierno autónomo de Manuel Chaves tiene nada menos que 24 consejeros sentados en la asamblea de la caja. El ejecutivo autonómico andaluz tiene, además, adjudicado otro segundo préstamo de más de 66 millones con otra caja de la zona, Caja de Sevilla y Huelva (El Monte).
Obviamente, el Ayuntamiento de Sevilla, que sienta un total de ocho consejeros en la asamblea de Caja San Fernando ha conseguido también una línea de créditos que supera los 14 millones y otros 15 millones en El Monte. Sin embargo, la mejor tajada en operaciones crediticias de la corporación sevillana la ha sacado con Caja Madrid. Cerca de 50 millones (en tres préstamos) le ha concedido la caja madrileña.
Expansión andaluza
Según fuentes de esta caja, la entidad está muy interesada en su proyección andaluza (ahora mismo tienen abiertas unas 140 sucursales en esta comunidad) y el Ayuntamiento hispalense cuenta ya con un representante en su asamblea.
El segundo lugar de este ranking de cajas lo ocupa la Caja del Mediterráneo (CAM), con casi 221,8 millones en créditos, de los que 180,7 millones han sido concedidos a la Generalitat de la Comunidad Valenciana, gobernada por el PP. De todos sus préstamos concedidos, sólo dos ayuntamientos gobernados por el PSOE (Elche y Xirivella), han conseguido línea crediticia de la CAM.
Caja Madrid es la tercera entidad por volúmen de créditos con 189,4 millones de euros. El Ayuntamiento de la capital es el más beneficiado con dos cuentas de crédito abiertas (va disponiendo del préstamo según sus necesidades y es la forma más habitual de financiar, por ejemplo, las obras de la ampliación de la M-30). En la asamblea de la caja madrileña se sientan nada menos que 69 representantes de la corporación (tanto del equipo de Gobierno como de la oposición). La caja madrileña reparte, sin embargo, entre los ayuntamientos del PP (Alcalá de Henares o Pozuelo) y del PSOE (Leganés o Alcorcón) el resto de los créditos.
Caja Duero (de Salamanca y Soria) es la cuarta entidad de ahorro en este ranking con un total de 148,6 millones otorgados. Sus principales clientes son los ayuntamientos de Salamanca y Valladolid, ambos gobernados por el PP. Entre los dos llegan a casi 130 millones de euros.
Caixa de Catalunya concedió el año pasado más de 121 millones. Las instituciones públicas gobernadas por el PSC-PSOE se llevan todo el pastel. La diputaciones de Barcelona, que tiene 55 representantes en la asamblea de la caja, y los ayuntamientos de Hospitalet, Mataró, Badalona y Sabadell centran la línea crediticia de la entidad.
Ibercaja (Zaragoza y Aragón) repartió en 2006 casi 98 millones, de los que dos tercios se los adjudicó al Ayuntamiento de Madrid (una cuenta de crédito de 66 millones), que tiene dos consejeros en la entidad.
Caja Baleares adjudicó 80,4 millones en créditos y casi una cuarta parte fueron para el Ayuntamiento de Calviá (PP). Caja Murcia, por su parte, facilitó unos 62 millones de euros, de los que 40 millones sirvieron para abrir una cuenta de crédito para el Gobierno de la comunidad autónoma, que tiene 35 consejeros en su junta.
En cuanto a la autonómica vasca Bilbao Bizcaia Kutxa (BBK), concedió 54 millones. Todos ellos se adjudicaron a instituciones gobernadas por el PNV. Sólo la Diputación Foral de Vizcaya recibió 34 millones. Para eso cuenta con 10 consejeros en su asamblea.
