«Tenemos que ser sinceros con nosotros mismos: la ciencia es el núcleo de nuestra civilización, y Europa lo ha olvidado durante demasiado tiempo». Con ésta y otras reflexiones sobre la urgente necesidad de relanzar la investigación en nuestro continente, y evitar así la fuga de cerebros, se presentó ayer en Madrid el Consejo Europeo de Investigación (CEI o, en inglés, ERC).
El nuevo organismo, que gastará 7.510 millones de euros de aquí a 2013 en financiar estudios de vanguardia, gozará de total independencia para seleccionar los proyectos que apoye, según explicó ayer su presidente, Fotis Kafatos.
De esta forma, se espera que los fondos del CEI, provenientes de la Unión Europea, puedan repartirse con criterios exclusivamente científicos. El objetivo es premiar los trabajos más audaces y revolucionarios del ámbito académico, incluidas las ciencias sociales y las humanidades, aunque siempre, según la expresión acuñada por el propio organismo, en la frontera del conocimiento.
«Ésta es una competición global, y Europa no puede ser relegada a un segundo o tercer puesto», señaló Kafatos, en alusión a los muchos talentos que se ven obligados a emigrar a Estados Unidos para poder trabajar a su nivel, así como al más reciente empuje de Asia en esta materia.
Tal y como recordó ayer el presidente del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Carlos Martínez, la ciencia europea y la norteamericana pueden equipararse en la cantidad, pero, «en la calidad, el liderazgo de Estados Unidos es indiscutible». Por ello, la creación del CEI responde a un viejo anhelo de los investigadores de nuestro continente, quienes llevan una década impulsando un organismo que apueste por «la investigación de riesgo».
Contribución de España
España, por su parte, pretende contribuir al éxito del CEI apoyando a los centros que cuenten con investigadores seleccionados por este organismo. Según señaló ayer el secretario de Estado de Universidades e Investigación, Miguel Angel Quintanilla, el Gobierno ayudará a estos científicos a que obtengan contratos indefinidos y, además, podrá conceder subvenciones directas a las instituciones que los acojan.
El CEI es el buque insignia del VII Programa Marco de Investigación y Desarrollo de la Unión Europea, y su presupuesto representa el 15% del total de dicho programa, que se extiende hasta 2013.
En este primer año de funcionamiento, el CEI lanza dos convocatorias de ayudas a la investigación: las becas de comienzo, dirigidas a subvencionar proyectos de investigadores con una experiencia posdoctoral de entre dos y nueve años, por valor de cerca de 150.000 euros cada una; y las becas para investigadores avanzados, dotadas con fondos que variarán entre 100.000 y 500.000 euros anuales durante un máximo de cinco años.