BARCELONA.-
Todo empezó con un error de ubicación. El dossier de prensa del Salón Internacional del Turismo de Cataluña (SITC) incluía a España en la lista de los expositores extranjeros que participan en esta edición junto a otros 73 países. Ramón Bagó, presidente del certamen, se apresuró a aclarar que se trataba de un error aunque admitió: «Me gustaría que no lo fuera».
Bagó, que es a la vez presidente del grupo turístico Serhs y que fue director general de Turismo de la Generalitat de Cataluña en la época de Jordi Pujol, mostraba así en rueda de prensa sus intereses independentistas a título personal. En el acto también participaron Josep Huguet, consejero de Innovación, Universidades y Empresa, y María José Peretó, directora de los salones para el gran público de Feria de Barcelona.
El SITC está destinado, como Fitur en Madrid, al público final. Por esa razón, explicó ayer Huguet, «Barcelona tiene que centrarse en el nicho de mercado mediterráneo y tender, a la vez, hacia una mayor profesionalización».
Los objetivos de esta feria son, además de promocionar el turismo de Cataluña, ayudar al cliente catalán a diseñar sus vacaciones. Por este motivo, el salón acoge los premios Cat Turisme, en los que pueden participar tanto empresas como instituciones procedentes de zonas en las que no se habla catalán. Recompensan a los expositores que presenten el mejor material gráfico y de promoción turística en catalán. El salón organiza estos galardones con la colaboración de la Secretaría de Política Lingüística y la Dirección General de Turismo de la Generalitat. Ésta es la cuarta edición de los premios, que en 2006 fueron a parar a la Diputación Foral de Guipúzcoa. También recibieron un diploma de reconocimiento el Centro de Atracción y Turismo de San Sebastián y Visit Scotland-British Tourist Authority, entre otros.
Antes de acceder a la Dirección General de Turismo de la Generalitat, Bagó fue el máximo responsable en esta área de la Diputación de Barcelona y alcalde de la localidad costera de Calella (Barcelona).
Tras finalizar su cargo como director general de Turismo -que ejerció desde 1980 a 1982- Bagó se vio envuelto en la polémica en 1996. Imma Mayol (diputada de Iniciativa per Catalunya-Verds) formuló una pregunta al Gobierno de Pujol sobre la relación entre el Govern y el grupo Serhs. La Administración pagó la asistencia de agentes de viajes al SITC de ese año contratando a Viajes Sehrs, que ya entonces ejercía la Presidencia del salón.
Mayol preguntó entonces «si existían irregularidades en esta adjudicación directa» y que la Generalitat confirmara «el motivo de la contratación, el sistema de adjudicación de la agencia de viajes y quién lo autorizó».
Aunque donde más peso tiene es en el sector turístico, el grupo Sehrs también ofrece bienes y servicios a la hostelería, la restauración o a la alimentación.
Por eso, la diputada de ICV-EV también afirmó que existían relaciones entre la Generalitat y el grupo Sehrs en al menos dos sectores: turismo y sanidad, ya que aseguraba que algunos centros hospitalarios de Cataluña también tenían contratados ciertos servicios con dicho grupo. Una de las filiales del conglomerado, Cuina Sehrs, recibió, además, contratos del Departamento de Justicia en 1991.
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