El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, relegó al presidente de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), Manuel Conthe, en las invitaciones personales que dirigió para su gran acto del pasado lunes en la sede de la Bolsa.
El evento, organizado por la Oficina Económica de Presidencia del Gobierno, estaba destinado a la presentación del Primer informe económico del Presidente del Gobierno y, en su nombre, se repartieron centenares de invitaciones.
Para sorpresa de Conthe, la que llegó a la sede de la CNMV la semana pasada no iba a su nombre, sino al del vicepresidente de la institución, Carlos Arenillas. La tarjeta iba dirigida al «excelentísimo vicepresidente de la CNMV del Ministerio de Economía y Hacienda». La CNMV, aunque es teóricamente un organismo independiente, está adscrito al Ministerio de Economía. Conthe, aunque anunció el pasado 2 de abril su intención de dimitir, continúa siendo presidente de la institución en tanto no se den las condiciones que él considera necesarias para hacer efectiva su renuncia. Por tanto, esperaba ser invitado para un acto del presidente del Gobierno que, además, se celebraba en la sede que él debe supervisar, la de la Bolsa de Madrid.
Un portavoz oficial de la CNMV, declinó hacer comentarios, pero según ha podido saber este diario, Conthe se interesó por asistir al acto y preguntó si no le había llegado invitación por algún extravío. El Palacio de la Moncloa terminó remitiéndole una invitación, pero no como «excelentísimo presidente de la CNMV», sino como si fuera el ciudadano «señor don Manuel Conthe». Es decir, con un rango inferior al de Arenillas.
Conthe optó por no acudir al acto al que sí asistió Arenillas. La presencia de Arenillas y el hecho de que fuera el invitado preferido de Zapatero en la CNMV levanta expectación sobre si será el elegido por el Gobierno como sucesor de Conthe una vez que éste renuncie.
Arenillas une a su indiscutible experiencia en los mercados bursátiles el hecho de haber sido quien contrató en la pasada década a Miguel Sebastián para la firma Intermoney y el de ser esposo de la ministra de Educación, Mercedes Cabrera.
Sebastián, candidato socialista a la Alcaldía de Madrid, es el responsable del nombramiento de Arenillas en septiembre de 2004, mientras que el vicepresidente segundo, Pedro Solbes, fue el responsable de la elección de Conthe.
Arenillas se ha negado a dimitir, tal y como le solicita Conthe por razones aún no explicadas. El presidente de la CNMV no quiere que su sucesor sea su teórico número dos.
Solbes subrayó ayer en su comparecencia en el Congreso de los Diputados que «el señor Conthe fue nombrado con un vicepresidente, al mismo tiempo y, por tanto, conjuntamente con él y aceptado por él».
Sin embargo, las relaciones entre Conthe y Arenillas se han ido deteriorando hasta el estallido de las últimas semanas, en las que se acusan mutuamente de perjudicar a la institución y se piden mutuamente la renuncia al cargo.
La ausencia de Conthe en el acto del presidente del Gobierno contrastó con su asistencia ayer a una conferencia del alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, organizada por Europa Press. Según testigos presenciales, cuando Conthe llegó al hotel Villamagna fue conducido, como el presidente del PP, Mariano Rajoy, el secretario general, Angel Acebes, y otros dirigentes del partido a una sala VIP a la espera de que comenzara el acto. Al ver a lo más granado del partido de la oposición, Conthe abandonó rápidamente esa estancia y prefirió estar al margen hasta que, en la sala principal, escuchó la conferencia de Ruiz-Gallardón. Conthe no consideró apropiado, en su situación actual, ser visto departiendo con la oposición. El presidente de la CNMV es simpatizante confeso del PSOE, pero mantiene una buena relación personal con el alcalde de Madrid, con el que, según fuentes municipales, comparte además la necesidad de empujar a la capital española como importante plaza financiera.
Por otra parte, el comité de empresa de la CNMV señaló ayer que se abstiene como tal de intervenir en el caso, según miembros consultados, que no descartaron, no obstante, que haya iniciativas de recogida de firmas en favor de Conthe. Éste, aunque de trato áspero, no carece de respaldo entre el personal.