ALEJANDRO FIERRO
VILLALAR (VALLADOLID).-
María Pacheco nunca estuvo en Villalar. Murió en el exilio portugués, con apenas 34 años, sin conocer el lugar donde fue ejecutado su esposo, Juan Padilla. Casi cinco siglos después, esta heroína desconocida para el gran público, precursora de una modernidad femenina que no llegaría a España hasta bien entrado el siglo XX, ha podido ver el escenario donde se decidió la suerte de la revuelta de las Comunidades gracias a la periodista María Teresa Alvarez y su última novela, La comunera de Castilla, editada por La Esfera de los Libros y presentada ayer en el Ayuntamiento de la villa.
«María Pacheco fue una persona de la alta sociedad que lo pudo tener todo y lo tiró por la borda para defender sus ideales», explicó la autora; «hoy ha atravesado los siglos para llegar a Villalar y decirle a su marido que no estaba equivocado, que valía la pena luchar por sus ideales».
Utilizando alternativamente como narradoras a la protagonista y a Morayma, una morisca amiga de la infancia de la Pacheco, María Teresa Alvarez rescata la peripecia vital de esta mujer, hija de la nobleza castellana, que renuncia a sus privilegios por seguir a su marido en la revuelta comunera y le releva en el liderazgo una vez que Padilla fue ajusticiado junto a Bravo y Maldonado, acaudillando el movimiento en sus estertores en Toledo.
En la trama se combina la historia de amor entre María Pacheco y Juan Padilla -«se trata en gran parte de una novela romántica», señala la autora- y la convulsa Castilla de principios del siglo XVI, con la llegada del joven Carlos V, a quien le importaban más sus planes imperiales que el futuro del que fuera reino de su abuela, Isabel la Católica. Para recrear esta época, María Teresa Alvarez ha sido asesorada por dos grandes expertos, los historiadores Joseph Pérez, autor del canónico Los comuneros, y Manuel Fernández Alvarez, catedrático de la Universidad de Salamanca y premio Castilla y León 2007 de Ciencias Sociales y Humanidades, quienes estuvieron ayer en la presentación del libro, acto en el que también intervino el prestigioso medievalista Julio Valdeón.
Para Manuel Fernández Alvarez, la escritora «ha resuelto de una forma magistral» el dilema entre «rigor histórico» y «la fluidez narrativa», mientras que Joseph Pérez destacó que «a una mujer excepcional como María Pacheco» le hacía falta «una biógrafa excepcional que restituyera su epopeya, tan llena de emoción romántica y valor histórico».
«Este libro permitirá a todos los castellano-leoneses y españoles conocer mucho mejor una parte de su historia y a una heroína digna de figurar en los anales y por demasiado tiempo olvidada», afirmó.
Por su parte, el presidente de las Cortes, José Manuel Fernández Santiago, resaltó la vigencia del mito de los comuneros en Castilla y León, que sigue siendo «algo emocional que provoca que cada 23 de abril se junten miles de personas en este lugar» y calificó la obra de María Teresa Alvarez como un eslabón más en la consolidación de la historia de la revuelta.
Ymelda Navajo, directora general de La Esfera de los Libros, alabó la capacidad de la escritora y periodista para hacer de María Pacheco «un ser vivo en la novela». «La redacción de una novela histórica es siempre un trabajo de difícil equilibrio. María Teresa Alvarez ha sabido conjugar el conocimiento histórico con el desarrollo de las tramas y los personajes».
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