La empresa cuyas riendas lleva César Alierta rehusó ayer hacer comentarios sobre la transacción, si bien fuentes conocedoras de las negociaciones, citadas por Reuters, indicaron que hoy mismo se conocerían los detalles de la venta al banco australiano.

En caso de cerrarse, la operación daría el pistoletazo de salida del capital de Telefónica en grandes compañías consideradas no estratégicas. En esa lista también está la productora holandesa Endemol, cuyo desenlace se conocerá en la primera quincena de mayo. De momento, pujan por la firma cuatro empresas, de las que destacan la mexicana Televisa y Mediaset, grupo vinculado a Silvio Berlusconi. También podrían sumarse a las desinversiones el 10% de Portugal Telecom y el 1,07% que la operadora conserva del BBVA.

La venta de Airwave, primer operador móvil de servicios de urgencia (policía, bomberos y asistencia sanitaria) del Reino Unido, fue anunciada por Telefónica hace tres meses. Y responde al interés de la empresa por buscar otras alternativas estratégicas. La más destacable podría residir ahora en Italia, donde la empresa pretende a Telecom Italia, por sus fuertes intereses en Brasil.

Su entrada en el país transalpino, que se materializaría a través del holding Ollimpia -posee un 18% de la operadora- parece despejarse a tenor de la retirada de duros competidores como la estadounidense AT&T y, posiblemente, del empresario mexicano Carlos Slim, su gran rival en Latinoamérica, según el banco de inversión Goldman Sachs.

«El movimiento de AT&T, desde nuestro punto de vista, incrementa la posibilidad de que American Móvil (Carlos Slim) se retire en su debido momento», apunta la entidad en un informe. Eso sí, la entidad señala que la salida de Guido Rossi del grupo podría agravar más los riesgos de tipo político y regulatorio que penden sobre la empresa, informa Europa Press.