Los responsables de la investigación se basan para afirmarlo en la documentación incautada en su día al número uno de ETA, Mikel Albizu, Antza, arrestado a principios del mes de octubre del citado año y, según resaltan las Fuerzas de Seguridad, «máximo responsable del diseño de la estrategia política de la organización» durante 12 años.

Se centran, en concreto, en una libreta de hojas cuadriculadas con numerosas notas manuscritas en eus-kara por el entonces principal dirigente de la banda.

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En esta libreta, el etarra se refiere de manera especialmente críptica -prácticamente utilizando una clave propia- a la situación política de aquellos momentos. Pocos días después se iba a celebrar el acto del velódromo de Anoeta en el que Batasuna dio a conocer el método para iniciar un proceso de diálogo con el Gobierno.

En uno de los folios, Antza recoge lo que llama la «reflexión realizada por Batasuna». Varias expresiones en columna definen el resumen que el jefe del aparato político de la banda realiza de la citada reflexión: «unidad popular», «hacer todo bien», «miedo», «cómodos» y, tras la palabra «respuesta», una flecha que lleva a la frase «ANV presentado (presentación cerrada)». En la última línea, el jefe del aparato político de la banda insiste: «Batasuna ilegalizada», flecha, «congelar ANV», flecha y la palabra «luego».

Para los investigadores, las referencias hechas al partido legal en las notas del etarra sólo pueden tener una interpretación que es la de que ETA, al ver que su principal valor político había sido ilegalizado, decidió manipular de algún modo ANV y hacer uso de sus siglas para soslayar la anulación jurídica de Batasuna.

En otro de los folios, Antza divide el espacio en tres columnas. La primera de ellas viene encabezada, precisamente, de manera explícita, por el título «situación política». La segunda tiene como referencia la palabra «relaciones» y la tercera hace alusión a los «proyectos» que ETA tiene en marcha. Es en la columna de relaciones en la que, de nuevo, aparecen las siglas de ANV.

La prueba, entre otras, de que no se trata de una mera hipótesis o un planteamiento teórico la constituiría el hecho de que en la columna destinada a los proyectos, el entonces jefe del aparato político de la banda terrorista hace mención al llamado «EH4». Se denomina así un documento de debate sobre los pasos que la banda debía seguir en el futuro, que, efectivamente, se tornó en una propuesta real cuando fue enviado, a través de Xaki -el aparato internacional de la banda- a todos los etarras dispersos por distintos países.

Fue el juez Baltasar Garzón, que tiene abierta la causa penal contra Batasuna, quien consideró pertinente sumarse a las solicitudes de investigación y elaboración de los correspondientes informes realizadas por la Fiscalía General del Estado sobre los posibles vínculos entre la formación ilegalizada y ANV.

Los agentes de la Guardia Civil llegan a la conclusión de que tras el proceso Batasuna -en el que ETA dio la orden de que se unificasen las organizaciones de la izquierda abertzale a los dos lados de la frontera-, ANV, que estaba integrada en la coalición Herri Batasuna, pasó a tener una relación preferente y de sometimiento. Aseguran, y hay documentos que lo prueban, que, desde entonces, desde 2002, las órdenes dadas por la banda eran cumplidas con igual disciplina por Batasuna y por ANV.

Por el momento, entre dos y tres de cada 10 miembros de las listas presentadas durante el pasado fin de semana por ANV han formado parte o han tenido relación con Batasuna o con otra organización ilegalizada de la izquierda abertzale. Ésas son las estimaciones realizadas en una primera aproximación por las Fuerzas de Seguridad. De confirmarse estas cifras, una buena parte de las listas de esta formación legal podría haber quedado contaminada por el desembarco de miembros de la formación ilegalizada, si bien han de ser los tribunales los que determinen esta consideración. A media tarde de ayer, por ejemplo, cinco de los 22 miembros de la lista de Acción Nacionalista Vasca a las Juntas Generales de Vizcaya contaban con algún inconveniente. Sin ir más lejos, el máximo dirigente de ANV, Kepa Bereciatua, candidato por HB en 1987 y en 1989, encabeza una de las planchas.

Respecto a las candidaturas municipales avaladas públicamente por Batasuna, las mismas fuentes indican que, aproximadamente un 75% de los candidatos están contaminados.

El cuaderno de Antza, en definitiva, fue incautado junto con otros documentos entre los que se encuentra su plan sobre el proceso de negociación con el Gobierno publicado en su día por este periódico. Un plan que incluía fechas, contactos preliminares con otras organizaciones y con formaciones políticas, y el nombre de la Fundación Henri Dunant, el centro que ETA y el Ejecutivo utilizaron como intermediario para las negociaciones que los enviados de ambos protagonizaron durante la pasada tregua.

La Ertzaintza también ha elaborado un documento de dos folios con datos extraídos de la enciclopedia de internet Wikipedia, a los que añade un apéndice de 10 páginas con recortes de periódicos. La Policía Autónoma concluye que no hay irregularidad alguna en ANV.