«Ése ha sido el marco en el que se ha venido produciendo la participación de ANV en cuantas iniciativas se han puesto en marcha desde la izquierda abertzale, bien a través de Batasuna, bien a través de las plataformas en las que este partido participa junto a dicha formación política ilegalizada», según sostiene el informe elaborado por la Policía Nacional para el juez Baltasar Garzón al que ha tenido acceso el diario EL MUNDO.

El magistrado ha recibido también un informe de la Guardia Civil en el que los agentes, tras analizar la historia de ANV, de ETA y de Batasuna, y sus documentos correspondientes, afirman que «tanto a través de los comunicados y de los boletines de ETA como de las declaraciones públicas y la actividad general de los dirigentes de Batasuna, se revela claramente una sintonía con la organización terrorista respecto a los principios que rigen la actividad política de ANV y su ejecución práctica».

La Policía explica que la reunión con los dirigentes de la Mesa Nacional se produjo después de que ANV celebrase su 10º congreso nacional ,en el que fue aprobada una ponencia política cuya directriz era la de mantenerse fuera de la estructura de Batasuna para conservar su «propia perspectiva independiente», pero «confirmar su ubicación en el espacio político de la izquierda abertzale y en el mismo frente de Batasuna».

Una perspectiva independiente pero con una más que ambigua posición práctica de sus dirigentes respecto de la violencia. El mismo informe señala que «los responsables de ANV, tras la ilegalización de HB y EH, expresaron su rechazo a la misma y su disposición a prestar la cobertura necesaria para que la izquierda abertzale pudiera participar en las elecciones». Sin embargo, poco después explica que Acción Nacionalista Vasca, en ese congreso de junio de 2002, rechazó expresamente las propuestas que le fueron realizadas por el Foro de Bayona, integrado por Eusko Alkartasuna, Zutik, Aralar y Abertzaleen Batasuna y que venían contenidas en el documento «Entrelazando Fuerzas».

Un día después de esa Asamblea, según recoge el informe de la Policía, el diario Gara entrevistó al secretario general de la formación, Antón Gómez, y le preguntó por qué se negaba a engrosar el citado foro y éste respondió: «Tiene dos errores importantes; por un lado, coloca el alto el fuego como condición previa para avanzar; y por otra parte, la gran falta de compromiso de los partidos que lo firman. El documento no concreta el camino hacia la soberanía».

Gómez fue uno de los que, seis meses después firmó, el protocolo con Batasuna.

La Guardia Civil también secunda este argumento cuando desmonta la tesis de quienes sostienen que este partido es similar a Aralar alegando que el trato que les da la banda terrorista es totalmente distinto: «A pesar de dejar de formar parte de la Mesa Nacional, ANV ha continuado siendo considerada, tanto por ETA como por la propia Batasuna, como parte de la izquierda abertzale, como se demuestra al comparar la actitud que ha mostrado ETA con ANV, y la mantenida con otras formaciones políticas que debe prevalecer la acción política sobre la lucha armada».

El informe de la Policía también considera sospechoso que, con la precaria infraestructura de la que dispone, aspire a participar en las municipales. «Como quiera que ANV nunca ha concurrido como tal formación política en ningún tipo de comicios, la presentación de candidaturas constituiría una novedad, a lo que hay que añadir que su escasa base social haría aún más sorprendente la pretensión de presentarse a unas elecciones de carácter municipal en localidades donde sencillamente no existe o en territorios como Navarra donde no se tiene constancia de que ANV tenga un solo comité. De hecho, en su Comité Nacional no figura ninguna persona domiciliada en ese territorio», se afirma.

Los agentes policiales recogen los nombres de los dirigentes del partido, encabezados por Kepa Bereciatúa, y detallan dos puntos que ya fueron adelantados por este periódico: sus vínculos con formaciones que han sido ilegalizadas y el hecho de que un miembro de la Mesa Nacional de Batasuna ha estado dando instrucciones a una de las representantes de ANV por Guipúzcoa para estas elecciones.

En cuanto al informe de la Guardia Civil, incluye las notas manuscritas del que fuera jefe del aparato político de ETA durante 12 años, Mikel Albizu, Antza, que demuestran, según los agentes, que la banda, «al ver que su principal referente político era ilegalizado, decide manipular de algún modo la formación ANV, sin duda ante la posibilidad de hacer uso de sus siglas para soslayar la ilegalización».

Los agentes incluyen también una historia del partido y una relación de documentos internos de ETA, para intentar demostrar sus vínculos. Se recuerda que en el Zutabe 35, de septiembre de 1983, se establece que la Mesa Nacional de Batasuna se componga de los representantes de los partidos HB, ANV y HASI. En el Zutabe 37, tras una reunión de KAS, la banda publica las propuestas para las listas electorales de 1984 para el Parlamento Vasco, en las que figuran como candidatos los miembros de ANV Rafael González y Gregorio Rekarte.

Cuando la Mesa Nacional ingresó en prisión, Amaya Bao, miembro del Comité Nacional de ANV, fue condenada a siete años porque formaba parte de la dirección del partido luego ilegalizado.