Jorge Carretero es el portavoz de la directiva de la Federación Española de Fútbol. Se trata del dirigente que tras la eliminación en octavos del Mundial del equipo de Luis Aragonés, frente a Francia, comenzó a darle vueltas a la necesidad de dar un paso adelante para dar brillo y esplendor al sentimiento nacional, un asunto políticamente incorrecto en los tiempos que corren, pero necesario de urgencia desde su punto de vista en el terreno deportivo.

Carretero, que se encontraba ayer junto al presidente Villar al frente de la delegación española en Riga, comentó para este periódico las primeras impresiones sobre la iniciativa del presidente del Comité Olímpico Español (COE), Alejandro Blanco. «Nos parece fantástico. Es el COE, como depositario del deporte español a nivel internacional, el que se debe hacer cargo de esta cuestión tan interesante y desde nuestro parecer tan positiva. Nuestro deseo es que acierte al realizar los pasos adecuados y que dentro de poco nuestros deportistas puedan cantar y no sólo escuchar el himno español».

Carretero apretó unos cuantos botones tras el regreso de Alemania. Su plan no era otro que el de una campaña para potenciar la fidelización con el equipo nacional. La creación de un carné de simpatizante del conjunto nacional estaba en el proyecto. Otro de los pasos que se iban a dar era potenciar el sentimiento de unidad desde las categorías inferiores de la selección. Los jugadores de la absoluta también participarían de esta acción. «Coincidimos en la Federación en el análisis de los motivos por los cuales nuestro primer equipo de fútbol no lograba grandes resultados en los torneos más importantes. Había varios, evidentemente, pero éste, el del sentimiento nacional, estaba bastante cojo, y eso habían echado de menos líderes históricos de la selección, que demandaban elementos de cohesión como puede ser la letra del himno u otros. Lo que tenemos que transmitir a nuestros jugadores de todas las categorías es que unidos por un mismo hilo conductor, el trabajo tendría no sólo un obstáculo menos, sino un empujón más», afirma Carretero.

Los malos resultados del equipo nacional en los primeros encuentros de la fase de clasificación para la Eurocopa ralentizaron aquella labor. El ímpetu con el que ahora el COE parece haber enfocado el asunto le recuerda a la Federación Española que no está sola en esta idea. «Queremos transmitir que vestir la camiseta nacional es lo más grande que puede pasarle a un deportista. Si eso se tiene claro desde muy joven las posibilidades de éxito serán mayores», insiste el portavoz de la junta directiva.

Los internacionales del conjunto nacional no han podido valorar en profundidad aún la iniciativa respecto a una letra para el himno español. Concentrados para el partido de anoche, algunos a los que tuvo acceso este periódico: «Si los españoles somos capaces de ponernos de acuerdo en un asunto así, entonces es que algo habrá cambiado en este país», confesó uno de los veteranos del equipo nacional y partidario del proyecto.

Sin embargo, el hecho de que justo ayer la retransmisión de TVE se iniciará cuando ya se había tocado el himno en Riga provocó una profunda indignación en Villar y sus directivos.

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