Varios miembros de la Ejecutiva Federal del PSOE salieron ayer de la reunión interna convencidos de que José Luis Rodríguez Zapatero tiene perfectamente diseñada su hoja de ruta para ganar las elecciones generales de 2008 y, en ese diseño, está José Bono como diputado por Toledo y posible presidente del Congreso.
Zapatero quiere contar con el ex presidente de Castilla-La Mancha, ex ministro y ex barón socialista por muchos motivos, pero dos son los fundamentales: sumar más o, al menos, consolidar el número de diputados al Congreso en la comunidad que presidió Bono durante más de 20 años y, sobre todo, que haga de parapeto frente al discurso del PP sobre las cesiones a ETA o los nacionalistas.
En la dirección del PSOE se hacían los despistados del porqué surgió ayer la noticia, pero en varias cenas y encuentros de alto nivel de la dirección del partido se ha barajado, en las últimas semanas, la necesidad de recuperar a Bono como un valor indiscutible para frenar los dos mensajes citados que, a buen seguro, el PP utilizará en la próxima precampaña y campaña electoral. Según el PP, la vuelta de Bono trata de contrarrestar en lo que toca a la política antiterrorista, en la presencia de ANV en las pasadas elecciones, la negociación política con ETA tal como la describe Gara y la internacionalización del proceso de paz. Y en cuanto a las cesiones a los nacionalistas, el objetivo sería contrarrestar el efecto del Estatuto catalán y los pactos con opciones radicales.
Es decir, con la vuelta de Bono a la actividad política, el PSOE quiere contar con un activo, muy creíble entre la ciudadanía, para reforzar, sobre todo, el mensaje de que habrá mano dura contra ETA, sin concesiones de ningún tipo.
Todo ello, sin embargo, está todavía sujeto con alfileres, aunque la posibilidad de que el dirigente castellano-manchego repita un numerito como el de su candidatura a la Alcaldía de Madrid no está en las previsiones.
De momento, Bono y sus personas más cercanas, optaron ayer por no hacer ninguna declaración al respecto, ni sobre su candidatura como diputado por Toledo ni sobre la posibilidad de que sea presidente del Congreso de los Diputados, lo que tendría que pasar obligatoriamente por los votos del PP, ya que entre los nacionalistas no tiene ningún afecto y no conseguirá ningún apoyo.
Por ahora, desde la dirección federal del PSOE sólo se dice una frase: «José Bono, si él quiere, tiene todas las puertas abiertas para ir como cabeza de lista por Toledo al Congreso de los Diputados», afirmó a EL MUNDO José Blanco.
Eso sí, el PSOE no se pronuncia, lógicamente, sobre la posibilidad de que presida la Cámara Baja, algo que depende de múltiples factores y, entre otros, de que Zapatero gane las elecciones.
Fuentes socialistas, además, indicaron que la decisión definitiva no se tomará hasta noviembre o diciembre, pero no negaron que para el PSOE «es un lujo» volver a contar con Bono de cara a las elecciones generales.«En Castilla-La Mancha hay muchos diputados en juego entre PSOE y PP, y Bono sería todo un valor político, porque no sólo sumaría a la lista de Toledo -donde el PP logró tres diputados, frente a los dos que consiguió el PSOE-, sino que arrastraría votos en toda la región», afirmó una fuente autorizada del PSOE.No obstante, la dirección del partido no conocía ayer un nuevo ofrecimiento al ex dirigente manchego, aunque sí sabía que la oferta no era nueva ya que Zapatero se la hizo el mismo día en el que hablaron de su dimisión como ministro de Defensa.
Por ello, el PSOE está a lo que decida Bono, pese a que hace sólo 15 meses, cuando dejó voluntariamente la cartera de ministro de Defensa, afirmó que «la vida es más importante que la política».
Sea como sea, lo cierto es que Zapatero y el PSOE están ya en plena ofensiva electoral y, según fuentes del partido, no se piensa parar el impulso político hasta el día de las elecciones.
Otras fuentes consultadas indican, además, que la apuesta que hace Zapatero por Bono -sabiendo el mal sabor de boca que crea en los grupos nacionalistas-, responde sólo a que el líder socialista tiene como objetivo ganar las elecciones por mayoría absoluta, y arañar diputados en todas las circunscripciones.
De hecho, algunos dirigentes socialistas hacían paralelismos ayer con el nombre de Juan Carlos Rodríguez Ibarra y, aunque en Extremadura el número de diputados en juego es mucho menos significativo que en Castilla-La Mancha, para reforzar el mensaje que ahora quiere dar Zapatero el ex presidente extremeño sería otro valor a tener en cuenta. Las elecciones ya están aquí, al menos para el PSOE.@LEAD:PORTADA