Los policías se acercaron a él y apenas le realizaron tres preguntas -siguiendo protocolos policiales de información- y le pidieron su documentación cuando este joven, que no ofreció ninguna resistencia, admitió ser miembro de la organización terrorista ETA. Se trata de Aritz Arginzoniz Zubiaurre, uno de los terroristas actualmente más buscados por las Fuerzas de Seguridad del Estado. Liberado (a sueldo) de ETA, formó parte del comando Vizcaya desarticulado el pasado mes de diciembre. Arginzoniz Zubiaurre logró eludir el dispositivo policial. En el momento de su detención, sobre las 13.00 horas de ayer, llevaba una mochila con una pistola, un temporizador y documentación falsa.

Al cierre de esta edición, las Fuerzas de Seguridad del Estado mantenían un espectacular despliegue policial en Santander para tratar de localizar y detener a Saioa Sánchez, compañera sentimental del detenido y presunta integrante del comando que pretendía perpetrar un atentado en Santander. No se descarta, según fuentes de la investigación, que el grupo estuviera compuesto por un tercer terrorista, aunque aún no se ha podido determinar.

La actuación policial ya evitó que los terroristas colocaran un coche bomba con más de 100 kilos de explosivos en Andalucía. El vehículo fue localizado en Ayamonte. También se interceptó otra furgoneta cargada con más de 160 kilos de explosivos en Francia, a apenas 15 kilómetros de la frontera con Navarra. Los etarras detenidos pretendían atentar en la capital navarra.

Según explicaron fuentes de la investigación, todo apunta a que los terroristas asentados en Santander (tanto el detenido como la huida) llevaban más de 15 días por la Comunidad de Cantabria y también ultimaban una acción.

El plan de estos etarras era por lo menos cometer un atentado con coche bomba. Así se desprende del hecho de que el etarra tuviera en su poder en el momento de la detención un temporizador, cuya única utilidad para ETA es perpetrar acciones con coches bomba.

Los investigadores han podido concluir ya que el detenido y su compañera sentimental y de comando han pernoctado en alguna ocasión en el camping de la pequeña localidad cántabra de Isla, cerca de Santander y también de Bilbao.

Ahora, los agentes tratan de localizar también la posible infraestructura etarra en la capital cántabra. Además, sospechan que los terroristas estaban únicamente a la espera de recibir el material explosivo con el que confeccionar el coche bomba. Estas fuentes sospechan que la actuación del comando en esta Comunidad iba a ser inminente.

Aritz Arginzoniz Zubiaurre se encontraba huido desde principios de este año tras encontrarse en Amorebieta (Vizcaya) el zulo donde fueron intervenidos 230 kilos de explosivos. Formaba parte de un comando integrado por Saioa Sánchez, Asier Larrinaga Rodríguez y Garikoitz Etxebarría Goikoetxea. Los dos últimos fueron precisamente entregados a nuestro país el 16 de marzo tras su detención en la localidad vascofrancesa de Ascain.

Aritz Arginzoniz Zubiaurre, joven etarra de 22 años, se encontraba ayer en la zona de los andenes de la estación. Según testigos de la captura, su comportamiento «algo nervioso y el mucho tiempo que permaneció sentado en distintos bancos de las dársenas» pudo levantar las sospechas de los agentes policiales que en esos momentos realizaban los controles rutinarios en la estación. Los agentes pidieron a Arginzoniz que se identificara y, al comprobar su documentación falsa, no ofreció resistencia y reconoció su pertenencia a ETA. Desde que se produjo la detención, miembros de la Policía Nacional y Local procedieron a acordonar la zona y a desalojar a más de un centenar de personas que en ese momento se encontraban en el interior de la estación.

Según la Delegación del Gobierno, la operación antiterrorista continúa abierta sin que aún haya transcendido el destino final y las intenciones del joven terrorista. Ayer por la mañana, antes de que se produjera la detención de Aritz Arginzoniz, el delegado, Agustín Ibáñez avanzó que se han incrementado los controles antiterroristas durante este verano en la región, «un nuevo impulso» por ser la época en la que más atentados se han registrado en Cantabria.

Arginzoniz se encontraba entre los terroristas más buscados. A los investigadores les ha sorprendido mucho que ETA haya tenido que recurrir de nuevo a un terrorista que tuvo que huir a Francia en diciembre al ser identificado por las Fuerzas y Cuerpos de la Seguridad del Estado.