Durante su intervención en uno de los cursos de verano organizados por la Universidad Complutense en El Escorial (Madrid), el ministro de Justicia recordó a esos empresarios que el único medio efectivo para poner fin a ese «chantaje» es que lo denuncien cuando reciban las cartas, algo que muchos de ellos no hacen por miedo.

El presidente de la Confederación de Empresarios de Navarra (CEN), José Manuel Ayesa, calcula en «un par de millares» el número de empresarios que han sido extorsionados por ETA, aunque no descarta que puedan ser muchos más.

Al ministro de Justicia no le sorprendieron estos datos, ni tampoco el hecho de que la organización terrorista vasca haya llevado a cabo un nuevo envío de cartas de extorsión, porque «cuando hablamos de ETA estamos hablando siempre de lo mismo», afirmó.

Fernández Bermejo explicó que existe «una investigación permanente» sobre estas prácticas de extorsión de ETA que, según la Guardia Civil, llegan a aportar a esa organización terrorista más de 1,5 millones de euros cada año.

«Los empresarios vascos y navarros deben ser conscientes de la necesidad de que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado les ayuden», dijo el ministro. «Mal se puede ayudar si no nos ayudamos todos», añadió.

Lo más importante en este caso, según dijo, es que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado están trabajando «con contundencia» y de forma «magnífica». No obstante, reiteró que ETA puede actuar «en cualquier momento».

Desde las filas del PP, la diputada Soraya Sáenz de Santamaría, responsable de Política Autonómica y Local de este partido, celebró que el ministro Fernández Bermejo reconozca ahora que ETA siempre «es lo mismo». Por eso, pidió al Gobierno que no vuelva a escuchar «los cantos de sirena» de Batasuna.

«En este momento en que padecemos una nueva oleada de cartas de extorsión y de kale borroka [violencia callejera], y en que el miedo de la gente está ahí, el Gobierno tiene que trasladar a todos la idea muy clara de que sólo la firmeza del Estado de Derecho y de la democracia van a servir para derrotar a ETA».

«Todos tenemos que tener eso bien claro y estar juntos en esa derrota contra quienes no les importa ni la tranquilidad ni el legítimo trabajo de los empresarios, los periodistas, políticos y tanta gente que tiene derecho a ejercer su profesión en libertad y sin miedo», afirmó esta diputada del PP.

El delegado del Gobierno en el País Vasco, Paulino Luesma, expresó su solidaridad a los empresarios vascos y navarros y les pidió que «confíen» en el Estado de Derecho, «pues éste no baja la guardia y conseguirá que los enemigos de la democracia sean detenidos», según informa Ramón Sanmartín.