Llevo los últimos cuatros años de mi vida sumergida entre documentos policiales, testimonios de miembros del servicio de inteligencia británico y recortes de periódico que cuentan «la verdad» sobre la muerte de Diana de Gales. He tenido acceso a datos médicos inéditos, a las conclusiones de los investigadores, a textos judiciales... Mucho de lo que he leído durante este tiempo son archivos secretos que no han visto la luz. Después de analizarlos una y otra vez, lo único que tengo claro es que la versión oficial tiene demasiadas contradicciones. Pronto publicaré el resultado de mis pesquisas (en la segunda quincena de septiembre, en el libro Diana de Gales: «Me van a asesinar», Ed. Arcopress). Existen pasajes en el informe sobre su muerte que son inmensos agujeros negros. Las incongruencias, una década después de su fallecimiento, ocurrido el 31 de agosto de 1997, y a punto de abrirse el proceso judicial -será en octubre- son escalofriantes. Me explico.
Antes del accidente, durante una semana entera, desapareció el Mercedes negro tipo S 280, matrícula 680LTV75, propiedad de la empresa Etoile Limousine. Ese mismo coche fue el entregado al hotel Ritz de Paris, único cliente de la agencia, para ser utilizado por Diana de Gales y Dodi Al Fayed. En ese automóvil ambos perderían la vida.
Transcurrieron sólo 24 horas tras la muerte de Lady Di para que las autoridades francesas cambiaran de versión. Pasaron de «culpar» a los paparazzi que seguían al Mercedes, a dejarlos en libertad. Durante ese tiempo, se produjo un robo con heridos en la agencia de prensa SIPA, donde se llevaron los discos duros de sus equipos informáticos. No menos inquietante fue el robo en la oficina de Lord Stevens, el comisario galés que ha llevado la investigación británica, a quien le desaparecieron varios ordenadores personales.
Se ha tardado años en conocer los datos médicos de los fallecidos y todavía hoy continúan siendo un secreto bien guardado por las autoridades.
Es un misterio que puedo desvelar ahora. Estos son algunos párrafos con las conclusiones de los especialistas: «Podemos decir que la muerte de Diana Spencer no ha sido inmediata tras el accidente. La tensión arterial era indetectable. Entró en el hospital Pitié Salpétrière, en estado de coma arreactivo, y a pesar de una intervención quirúrgica (toracotomía) y de la reanimación activa, no ha podido restablecerse la actividad cardiaca. La lesión anatómica observada en la intervención quirúrgica era una herida transversal de la cara anterior de la vena pulmonar superior izquierda que medía más de dos dedos de diámetro (...). Murió a la una de la mañana».
El cuerpo de la princesa fue embalsamado esa misma noche antes de practicarle la autopsia de forma ilegal, según las leyes francesas. El motivo, según el padre de Dodi, Mohamed Al Fayed, habría sido «ocultar el embarazo de Diana que estaba de nueve semanas. Ellos me anunciaron el embarazo el mismo día del accidente, a las 10 de la noche».
Curiosamente, las ropas que llevaba puestas la princesa la noche de su fallecimiento, fueron entregadas a su mayordomo, Paul Burrell, ya que ¡no las consideraron de interés! Burrell las quemó.
Dodi Al Fayed falleció en el acto. Su examen post mortem indicaba «la presencia de un traumatismo torácico importante con hundimiento de la caja torácica y fractura de pelvis. Mostraba también politraumatismo del miembro inferior y del miembro superior izquierdo (...) La autopsia nos permitiría observar las lesiones internas vasculares o viscerales. Asíse apreciará su gravedad y su incidencia en el proceso mortal». La autopsia continúa siendo una turbia incógnita. .
LA ETIQUETA 2.146.
Accedí a un informe sobre un oficial de la brigada criminal que reconoció haber confundido las etiquetas con los números de identificación de Dodi y Henri Paul, el chófer del Mercedes, adjudicándoles a los dos el mismo número de identificación: 2.146. Según las conclusiones policiales, la causa del accidente es la excesiva ingesta de alcohol del segundo. La duda es enorme: ¿a quién le realizaron los análisis? ¿Realmente fueron tomadas del cuerpo del guardaespaldas? Existen serias dudas sobre la guarda y custodia de las muestras de la autopsia. De hecho, hay un caso abierto en la corte de Versalles sobre la falsificación de datos en estos análisis y muestras de sangre de Henri Paul, promovido por Mohamed Al Fayed.
¿Le parece un episodio sacado de una película cutre de detectives? Puedo contar que existe otro elemento oscuro propio de una peli de espías. El ex agente del MI6 Richard Tomlinson aseguró, en una declaración firmada ante un notario, que la muerte de Diana de Gales se produjo de la misma forma en la que se planeó atentar contra el dictador serbio Milosevic. Con esta misma declaración testificó en Scotland Yard (es testigo en el caso por la muerte de Diana). ¿En qué consiste el plan? En guiar al coche a un túnel. Allí un agente dispararía un flash muy potente que inmediatamente cegaría al conductor, haciendole perder el control del vehículo. Este sistema, según Tomlinson, es muy utilizado por los servicios secretos.
Las autoridades señalaron que no había otro coche en el interior del túnel y -de haberlo- éste no tenía nada que ver con el accidente. Pero, en el informe del peritaje automovilístico se dice que se hallaron restos blancos de la misma resina polímera: «el color bianco corfo 224». Este ha sido aplicado sobre los vehículos Fiat, modelo Uno, montados en Rivalta Torinse y en Mirafiori (Italia).
Si aceptamos la hipótesis de que había un coche más involucrado, ¿quién habría apretado el click del flash? El automóvil sería propiedad del fotógrafo James Andanson. La policía francesa lo niega y dice tener pruebas suficientes de que se encontraba en su casa, junto a su mujer, a 170 millas de París. En un primer momento, Scotland Yard menciona dicho automóvil y manifiesta su interés en investigar durante un año la presencia de dicho vehículo. Finalmente, dan por finalizada su búsqueda al no poder localizarlo.
Sin embargo, es enigmático que Andanson apareciera muerto dentro de un Fiat Uno de color blanco, completamente calcinado. Esto ocurrió dos años después de haber prestado declaración sobre la muerte de Diana en el túnel del Alma de París. La policía dijo que fue suicidio. Sin embargo, las puertas del vehículo estaban cerradas desde fuera. Seis semanas después de su muerte, todos los archivos con su nombre fueron robados de las agencias para las que trabajaba..
COMO FUE EL CHOQUE.
El experto designado por la policía francesa, M. Nibodeau, indica, en un texto oficial, que el choque pudo ser de dos formas: «contra el pilar 13 de forma perpendicular... o de forma paralela a la carretera después de haberse subido sobre la mediana central». Hasta ahora se había dicho que el choque del vehículo donde murió Diana fue frontal, lo que explicaba las graves heridas de sus ocupantes ya de por sí inexplicables a la velocidad de 90 km por hora.
El juicio -con todas estas contradicciones en el tintero- comenzará en octubre. La presión mediática y económica es enorme. El multimillonario dueño de Harrod's ha invertido más de cinco millones de euros -entre abogados e investigadores privados- para esclarecer la muerte de su hijo Dodi. La policía no da su brazo a torcer, sigue echándole la culpa al chófer del Mercedes.
Dos jueces ya han abandonado el caso. El primer magistrado M.J.C. Burgess se retiró por «exceso de trabajo». Su sucesora, Elisabeth Butler-Sloss se jubiló. Por supuesto, con polémica. Se habría pronunciado, anticipadamente, a favor del cuestionado informe policial. Finalmente, Scout Baker será el encargado de llevar el proceso. ¿Con él se acabará el culebrón?
Concha Calleja publicará en septiembre Diana de Gales: «Me van a asesinar» en Ed. Arcopress
¿QUE PASO CON EL MERCEDES?
«Antes del accidente, durante una semana entera, desapareció el Mercedes negro modelo S 280, propiedad de la empresa Etoile Limousine que trabajaba para el Ritz. Fue encontrado por las autoridades francesas y devuelto. En ese coche, Diana y Dodi Al Fayed perdieron la vida».
¿LA MISMA ETIQUETA PARA DOS MUERTOS?
«Se asignó el mismo número de identificación a Dodi y a Paul Henri, el chófer del Mercedes. Según las conclusiones policiales, la causa del accidente es la excesiva ingesta de alcohol del segundo. La duda es: ¿a quién le realizaron los análisis?»
¿COMO FUE REALMENTE EL CHOQUE?
«El experto designado por la policía francesa indica, en el informe oficial, que el choque pudo ser de dos maneras: "contra el pilar 13 de forma perpendicular... o de forma paralela a la carretera...". Hasta ahora se había dicho que el choque del vehículo donde murió Diana fue frontal, lo que explicaba las graves heridas de sus ocupantes».
¿HUBO UN FIAT UNO BLANCO IMPLICADO?
«Las autoridades señalaron que no había otro coche en el interior del túnel y -de haberlo- éste no tenía nada que ver con el accidente. Pero, en el informe de peritaje automovilístico se dice que se hallaron restos blancos de la misma resina polímera: el color bianco corfo 224. Este ha sido aplicado sobre los vehículos Fiat, modelo Uno, montados en Rivalta, Torinse y en Mirafiori (Italia)».
