En al menos tres casos el acompañante de la víctima vivió una situación degradante. Era obligado a tirarse al suelo y servir de colchón para que el cabecilla de la banda violase a su pareja. De los nueve integrantes de la organización cinco están en prisión y el resto han sido puestos en libertad.

El caso ha sido investigado por el Servicio de Atención a la Mujer de la Brigada de Policía Judicial de Madrid.

Los agentes analizan ahora la posible relación de esta agresor sexual con otras violaciones cometidas también recientemente en el parque. Algunos de estos ataques han sido denunciados en la comisaría de Pozuelo de Alarcón, según señalaron las mismas fuentes.

La Policía está a la espera de cotejar el ADN del supuesto agresor recogido en otros casos de violación para confirmar si está implicado en más delitos sexuales. Además, se sospecha que ha podido cometer los mismos actos delictivos fuera de la región.

Todas las víctimas de este violador en serie son menores de 24 años. La más joven de las atacadas tiene 18 años de edad.

No se descarta que se hagan nuevas ruedas de reconocimiento con varias de las víctimas que podrían identificar al cabecilla colombiano como su presunto agresor sexual.

Las violaciones se habrían producido de madrugada y en las zonas más oscuras y recónditas del Parque de Oeste y de la Casa de Campo, por lo que nadie pudo escuchar los gritos de auxilio de las víctimas.

A todos los miembros de la banda se les imputan delitos de robo con violencia y amenazas de muerte. Al cerebro de la red se le acusa también de un delito continuado de agresión sexual.

Siempre actuaba rodeado de sus compinches y amenazaba a sus víctimas con un cuchillo de cocina de grandes dimensiones que los agentes de la Policía decomisaron en el registro de la vivienda donde residía.

La primera agresión se produjo el viernes 16 de agosto y la última el pasado sábado, cuando la capital celebraba los actos culturales de La Noche en Blanco, según indicaron fuentes judiciales a Europa Press. Las violaciones denunciadas por todas las víctimas eran idénticas. En todos los casos, un joven actuaba arropado por un grupo de amigos que siempre quitaba los objetos personales y el teléfono móvil a las víctimas.

La Policía estableció un dispositivo especial de vigilancia en la zona en busca de los agresores. El resultado no tardó en llegar.

Los agentes lograron una pista que llevó a identificar a uno de los miembros del grupo. El pasado lunes por la noche los agentes efectuaron, con la orden judicial correspondiente, el registro de una casa situada en la periferia de Madrid. Fueron detenidas un total de nueve personas relacionadas con esta banda. Todas en la misma zona.

Entre los apresados había sólo una mujer. Todos los arrestados tenían entre 18 y 20 años y eran de nacionalidad colombiana y guatemalteca.

En la entrada y registro del domicilio donde fueron detenidos los presuntos integrantes de este grupo, la Policía se incautó de ropa, que posteriormente las víctimas identificaron como la que portaba el agresor sexual, así como de teléfonos móviles y joyas que éste les había robado.

Los investigadores recuperaron en el piso más de 30 teléfonos móviles, lo que hace pensar a los agentes que los integrantes de la banda están detrás de un mayor número de delitos que los denunciados hasta ahora.

El líder de la banda, de nombre César, ha sido identificado «sin ningún género de dudas» en rueda de reconocimiento por cuatro chicas que sufrieron agresiones sexuales en dicho parque durante las últimas semanas.

El juez de Instrucción número 15 de Madrid, en funciones de guardia, acordó el martes por la noche el ingreso en prisión y sin fianza de cinco miembros de la banda.

Al cabecilla del grupo solamente se le relaciona con las violaciones cometidas en dicho parque durante el último mes, informaron a Europa Press fuentes jurídicas.

Las acciones delictivas de este grupo han motivado la apertura de diligencias judiciales en tres juzgados de Instrucción diferentes, los números 2, 16 y 47 de Madrid, por delitos de robo con fuerza e intimidación cometidos en el mismo parque desde el año 2006. El primero de estos juzgados es el que investiga las agresiones sexuales, según indicaron las mismas fuentes.

El cabecilla de esta violenta banda y el presunto autor de las violaciones era un hombre repugnante por lo que hacía y lo que decía. Abusaba de sus víctimas delante de sus secuaces y se reía a carcajadas.

En al menos tres ocasiones agredió sexualmente de las jóvenes en presencia de la pareja de ésta. Y lo más humillante es que utilizaban al acompañante de la víctima como colchón. Es decir, lo obligaban a tirarse al suelo y encima de él colocaban a su víctima. Siempre intimidaba a las chicas con un cuchillo de grandes dimensiones. Además, el supuesto agresor sexual hacía comentarios degradantes a las víctimas: «Eres una guarra». Asimismo, explicaba a sus colegas que pretendía colonizar Madrid de sudamericanos. «Voy a llenar esta ciudad de mis hijitos», susurró a sus compinches en el piso de Madrid donde vivía.

De acuerdo con las primeras investigaciones policiales, los miembros de la banda se trasladaban andando al parque, aunque luego se movían en coche por la capital. En varios casos actuaron a cara descubierta y en otros se taparon la cara con una capucha o pasamontañas.

También se ha descubierto que se desplazaban a la Casa de Campo y al Parque del Oeste porque sabían que en estos lugares apartados se escondían jóvenes parejas en busca de un lugar para hacer el amor.

El cabecilla de la organización y sus integrantes no pertenecían a ninguna banda latina y no habían sido identificados por los agentes por otro delito, según informaron fuentes policiales.

Los investigadores han destacado la violencia y desprecio que la banda de agresores ejercía sobre sus víctimas, lo que las impedía reaccionar ante el temor que sentían por sus vidas.

Por su parte, este mismo año el SAM detuvo a otros dos violadores en serie acusados de cometer numerosas agresiones sexuales en los distritos de Moncloa, Fuencarral y Hortaleza.

Los detenidos fueron T.M., de 26 años y A.S. el A. de 21, ambos de origen marroquí, a los que se atribuyeron al menos, 15 agresiones sexuales, 13 de ellas violaciones, 16 robos con violencia e intimidación y delitos contra la propiedad.

También en diciembre del año pasado la Policía detuvo en Madrid a otro presunto violador en serie, Raúl P.L., de 31 años, que podría haber abusado de 14 menores, niños y niñas de entre seis y 12 años, a los que ofrecía participar en el sorteo de un juego electrónico para ganarse su confianza. Le llevaban siguiendo desde 2002.

1. Nueve detenidos. En la operación policial han sido detenidos nueve integrantes, todos con edades comprendidas entre los 18 y 20 años. Ninguno tenía antecedentes policiales.

2 Robos y amenazas. A todos los miembros de la banda se les imputan delitos de robo con violencia y amenazas. Sólo al cabecilla se le acusa de los delitos de agresión sexual entre el 16 de agosto y el pasado 20 de septiembre.

3. Cinco violaciones. Se le atribuyen cinco violaciones pero se sospecha que podría estar detrás de otras seis. También se investiga si está detrás de más casos ocurridos fuera de la región.

4. Registro nocturno. El pasado lunes por la noche los agentes registraron la casa donde vivían los detenidos. Se incautaron de ropa que las víctimas identificaron como la que portaba el agresor sexual, así como de teléfonos móviles y joyas que el violador les había robado.

5. Prisión. El juez de Instrucción número 15 de Madrid acordó el pasado martes el ingreso en prisión y sin fianza de cinco de los detenidos.

6. Ruedas de reconocimiento. El líder de la banda ha sido identificado en ruedas de reconocimiento por cuatro de las chicas agredidas.

7. 'Modus operandi'. Utilizaban al compañero de la víctima de 'colchón'. Lo obligaba a tirarse al suelo y encima de él colocaba a la chica a la que iba a violar. Siempre intimidaba a las víctimas con un cuchillo de cocina de grandes dimensiones