También anunció que enviará este bando a todos los vecinos, y que con él se les facilitarán dos números de teléfono para que hagan llegar sus quejas e iniciativas y aporten ideas al presupuesto de la localidad guipuzcoana. Acompañada por los ediles Manuel Michelena y Laura Garrido, la primera edil popular explicó esta iniciativa porque, de esta manera, se garantizará el «anonimato y la seguridad de los vecinos» del municipio, frente a quienes sólo pretenden «mantener el silencio» para seguir «gozando de sus particulares intereses».

Asimismo, anunció que el Ayuntamiento rendirá un homenaje el 2 de octubre de 2008 a Ramiro Quintero Avila, un guarda forestal de origen canario asesinado por ETA en 1978, cuando residía en la localidad guipuzcoana, y a quien la banda terrorista mató tras conocer que era un guardia civil retirado. La alcaldesa todavía no se ha puesto en contacto con los familiares de esta víctima del terrorismo, ya que no viven en Lizarza, aunque señaló que lo hará en breve.

Otaola se ha encargado de que la bandera española volviera a ondear ayer en el Ayuntamiento de Lizarza y ha descolgado el plástico con la ikurriña y la leyenda Geurea (La nuestra), que el pasado sábado seguía presidiendo el balcón consistorial. La primera edil popular pidió a los vecinos del municipio que entiendan que al izar la enseña española no pretende «imponer» ningún símbolo, sino «cumplir la ley», que contempla la bandera española y la ikurriña como «símbolos cooficiales de todos los vascos».

El bando, en el que Otaola expresa sus ganas de trabajar por el pueblo, será enviado a todos los vecinos, quienes durante «demasiado tiempo se han visto obligados a llevar sobre sus hombros el yugo de la imposición de ETA y el terror de sus representantes políticos, antes de HB y ahora con la máscara de ANV», señaló.