También ayer por la mañana fueron arrestados la secretaria del Ayuntamiento, Laura Bastida; el jefe de la Policía Local, Alfonso Canales, y el empresario de hostelería Pedro Martínez Ruiz. La Guardia Civil imputa a estos tres detenidos un presunto delito de falsedad documental.

La investigación corre a cargo del Grupo de Delitos Urbanísticos de la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil. Ayer, sus agentes registraron cinco edificios: el Ayuntamiento, la Concejalía de Urbanismo, la Sociedad de Suelo Industrial y Vivienda de Totana (Proinvitosa) y una empresa privada. Además, visitaron una entidad financiera para revisar el contenido de varias cajas de seguridad a nombre del empresario, que acompañó a los agentes.

Los cuatro detenidos ayer vienen a sumarse a los seis que fueron arrestados el pasado 26 de noviembre. De los detenidos el lunes, que ya han pasado a disposición judicial, sólo uno, un empresario, lo fue en Totana. El resto trabajaba en Galicia, Madrid y Murcia capital.

Durante todo el día, los investigadores hicieron acopio de hasta nueve cajas cargadas con documentación en papel y diversos archivos informáticos cuyo contenido está siendo investigado. Por eso, la operación sigue abierta y no se descarta que haya más detenidos en los próximos días.

Once horas de registros

Tanto el primer edil como la secretaria asistieron a los registros que los agentes realizaron en la sede municipal desde las 8.00 de la mañana y hasta las 19.00 horas. En ese momento, ambos salieron del Ayuntamiento escoltados por efectivos de la Guardia Civil vestidos de paisano.

El alcalde fue introducido en un coche del Instituto Armado y Bastida en otro. Los dos vehículos partieron de la plaza de la Constitución arropados por la casi totalidad del equipo de Gobierno municipal, miembros de la Ejecutiva Local del PP y un numeroso grupo de vecinos dividido en dos bandos. Unos apoyaron al regidor y gritaron: «¡Alcalde, alcalde!», y le mostraron su apoyo con aplausos, informa Efe. Otras personas le llamaron «¡sinvergüenza!», pero no hubo incidentes.

Los dos fueron posteriormente trasladados a la Comandancia de la Guardia Civil de Murcia, al igual que el resto de los implicados.

Este municipio murciano tiene 26.000 habitantes y 300 kilómetros cuadrados de superficie. Al parecer, esta presunta trama de corrupción se dedicaba a pagar y cobrar comisiones a cambio de la recalificación de 2,2 millones de metros cuadrados rústicos. En ellos se podrían construir más de 5.000 viviendas a escasos kilómetros de la costa murciana. Supuestamente, la empresa que iba a salir beneficiada con su construcción es la sociedad gallega Noaria.

Ayer mismo, comenzaron a declarar ante la titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Totana los seis arrestados el lunes.

El anterior regidor de Totana y hoy parlamentario autonómico del PP, Juan Morales, también está siendo investigado, según informa Europa Press. Su ex mujer, propietaria de una agencia inmobiliaria de Totana, y su actual novia, que reside en Murcia capital, están imputadas en el sumario.