Las concentraciones de repulsa contra el atentado no discurrieron con la normalidad habitual. Hubo incidentes y abucheos al Gobierno en Madrid, pero también en León, Barcelona, Zaragoza, Sevilla, Córdoba y Málaga. Además, en las Juntas Generales de Alava y en el minuto de silencio convocado en el Consistorio de Hernani (Guipúzcoa), los representantes de ANV se ausentaron para no solidarizarse con los familiares del fallecido.
En la capital, un buen número de asistentes a los cinco minutos de silencio convocados por el Ayuntamiento insultó a los representantes socialistas, en especial al concejal Pedro Zerolo. Muchos le llamaron «¡maricón!» de forma reiterada y le dijeron: «¡Vete a Cuba!». También arremetieron contra el secretario de Política Municipal del PSOE, Alvaro Cuesta, a quien llamaron «sinvergüenza».
El silencio fue interrumpido con gritos contra el Gobierno: «¡Zapatero, dimisión!» o «¡traidores!» y hasta contra el líder del PP: «¡Rajoy, si apoyas a la Zeta, apoyas a la ETA!». Entre banderas nacionales con crespones negros, algunos de los manifestantes lanzaron vivas a España y a la Guardia Civil.
En la puerta del Ayuntamiento de Madrid, intentando respetar esos minutos de silencio, se encontraba la representación institucional: el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón; el portavoz municipal del PSOE, David Lucas; el de IU, Angel Pérez, y ediles de los tres partidos. Además, pudo verse a representantes del PP, como su secretario general, Angel Acebes, el secretario ejecutivo de Seguridad, Ignacio Astarloa, o dos ex ministros, José María Michavila y Miguel Arias Cañete.
En León, las protestas fueron contra el alcalde socialista, que gobierna en coalición con UPL.
Durante el minuto de silencio que se guardó en la plaza barcelonesa de Sant Jaume, una veintena de manifestantes con banderas españolas lanzó vivas a España y profirió gritos contra el vicepresidente de la Generalitat, Josep Lluís Carod-Rovira, y contra el jefe del Ejecutivo, llamándolos «asesinos» y «fascistas».
La concentración de Zaragoza se desarrolló con tensión y cruce de insultos entre los que acusaron al Gobierno de haber negociado con ETA y los que defendieron al Ejecutivo. A las puertas del Ayuntamiento, en la plaza del Pilar, una mujer insultó al alcalde, Juan Alberto Belloch, y pidió la dimisión de Zapatero durante los minutos de silencio. En Sevilla, Córdoba y Málaga también se produjeron enfrentamientos dialécticos y algunos asistentes increparon al Ejecutivo y exigieron la marcha de su máximo representante.
En El Tiemblo (Avila), localidad natal del guardia civil Fernando Trapero, se concentraron cerca de 3.000 personas. El alcalde, Rubén Rodríguez, aseguró que los vecinos están «indignados, porque no se explican cómo dos guardias civiles pueden estar desarmados y rodeados de asesinos».
elmundo.es
Vídeo:
Vea las imágenes de los exaltados que insultan al concejal socialista Pedro Zerolo y la visita de Mesquida al guardia civil herido.
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Imágenes de las concentraciones de toda España .
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ETA: la dictadura del terror.
