La organización terrorista ETA ha reivindicado la «ejecución» de los guardias civiles Raúl Centeno y Fernando Trapero el pasado día 1 en la localidad gala de Capbreton y anuncia que va a seguir atentando en Francia contra los «aparatos represivos del Estado español».
Los pistoleros enviaron ayer un comunicado al diario Gara, que hoy publicará íntegro y del que hizo un adelanto en su edición digital, en el que no tienen empacho en calificar de «ejecución» el asesinato de los dos jóvenes guardias civiles.
Dice, además, que se produjo en un «enfrentamiento armado», a pesar de que los agentes iban desarmados, en cumplimiento del acuerdo con Francia para permitir la estancia de agentes españoles en su territorio.
En el comunicado, ETA asegura que ya advirtió «de forma directa» a los representantes del Gobierno español y a los mediadores internacionales, a lo largo del «proceso de negociación», de que había detectado lo que califica de «prácticas del terrorismo del Estado contra militantes vascos». Según la banda, les anunció que «ante esos intentos, respondería». La conclusión de los terroristas es que «ha ocurrido lo que estaba anunciado hace tiempo: el 1 de diciembre, ETA ha respondido ante la incesante presión de las fuerzas armadas de España contra militantes vascos».
La organización terrorista, según el resumen publicado ayer por la web periódico guipuzcoano, avisa de que seguirá en esta línea de actuación «contra todas las fuerzas y aparatos represivos del Estado español, en tanto éstos sigan siendo instrumentos para oprimir a Euskal Herria».
Y lo hará «sea donde sea», lo que deja claro que Francia ha pasado a ser un terreno en el que la banda terrorista piensa seguir actuando contra los agentes españoles que les persiguen en colaboración con las fuerzas de seguridad del país vecino.
De la literalidad del comunicado se desprende que los objetivos de los terroristas son sólo los policías y guardias civiles españoles, no los agentes franceses que también colaboran en la lucha contraterrorista.
En la breve reseña se señala también que ETA se atribuye cinco acciones armadas llevadas a cabo en los últimos meses, es decir, además del de Capbreton, los atentados contra el Palacio de Justicia de Guecho, con una bomba trampa que pudo ser desactivada por la Ertzaintza el 11 de noviembre; el intento de asesinato del escolta Gabriel Ginés en Bilbao con un artefacto colocado en su coche, el 9 de octubre; el explosivo contra la comisaría de la Ertzaintza de Zarauz, el 24 de septiembre; el coche bomba contra la delegación del Ministerio de Defensa en Logroño el 10 de septiembre y la explosión en el cuartel de la Guardia Civil de Durango, el 24 de agosto, con el resultado de dos agentes heridos.
Rajoy ofrece un pacto
Por su parte, el presidente del Partido Popular (PP), Mariano Rajoy, tachó ayer en Buenos Aires de «indecente y amenazador» el comunicado de la banda terrorista. Rajoy se mostró a favor de «una respuesta conjunta de todos los partidos políticos» a la nueva amenaza. Esta respuesta, según el líder de la oposición, debe incluir el compromiso expreso de que «no se negociará nunca más con ETA» y el de «ilegalizar Acción Nacionalista Vasca (ANV)», informa Carmen Remírez de Ganuza desde la capital argentina.
En opinión del líder de los populares, todos los partidos políticos deberían instar a la ilegalización de esta formación.