Ignacio González, vicepresidente de la Comunidad de Madrid, es un político de raza, curtido en mil batallas, que tiene a su favor haber ocupado cargos de responsabilidad en las tres administraciones: municipal , autonómica y nacional, con experiencia en los temas más variopintos, desde los complicados vericuetos de interior e inmigración, a las administraciones publicas, pasando por el canal de Isabel II e Ifema.

Sus amigos dicen que es una persona resolutiva, de esas a quienes no le tiembla el pulso a la hora de tomar decisiones complicadas y sus adversarios le respetan conscientes del enorme poder que maneja, no solo por ser el alter ego de Esperanza Aguirre, sino por su influencia en el partido en el que milita.

Si de muestra vale un botón, es el presidente del comité electoral regional, el encargado de elaborar las listas del PP por Madrid al Congreso de los diputados y, con esa autoridad, señala que «ser alcalde y diputado es incompatible con los estatutos del partido» o, lo que es lo mismo, que Gallardón no acompañará a Mariano Rajoy en su camino a La Moncloa. ¡La que se va a armar!

P.- ¡Menuda responsabilidad!, ser el encargado de elaborar las listas por Madrid. ¿Esperanza Aguirre estará incluida en esa candidatura junto a Mariano Rajoy?

R.- En el caso de Esperanza, no se le puede incluir porque la propia Ley Electoral la hace incompatible. En otros casos habrá personas que no puedan ir porque sea incompatible por los propios estatutos del partido, y otras que se queden fuera en aplicación de la Ley de Igualdad.

P.- Según ese criterio, ¿Alberto Ruiz-Gallardón sería incompatible?

R.- El artículo 7 de los estatutos dice que es incompatible ser diputado y ser alcalde.

P.- ¿Y esa norma es flexible o se trabaja con criterios cerrados?

R.- Los criterios son bastante concretos. En primer lugar, nosotros tenemos claro que donde mejor se defienden los intereses de Madrid es desde las instituciones madrileñas, especialmente desde la comunidad y el Ayuntamiento. En segundo lugar, es evidente que estas instituciones requieren una dedicación a tiempo completo, porque son administraciones grandes de gran relevancia política y administrativa. Por eso, los propios estatutos del partido desde hace muchos años establecen determinadas incompatibilidades entre el puesto de diputado y otros, como los de alcalde, presidentes de diputación, etcétera. A nosotros, lo que nos corresponde es elaborar una propuesta, y a día de hoy solo la podemos elaborar sobre los criterios que son de aplicación a todos, y en base a esos tres puntos que le he señalado.

P.- Pues como apliquen esos criterios a Gallardón, le puede dar algo. Ya ha dicho que quiere ser diputado e incluso ir de número dos en la lista por Madrid junto a Rajoy...

R.- Alberto, lo que ha dicho, es que quiere ayudar a Mariano Rajoy a ganar las elecciones, como queremos todos los militantes del PP. En mi opinión, la mejor manera de ayudar a nuestro líder a ganar es haciendo cada uno en sus responsabilidades el mejor trabajo posible. Otra cosa es que Esperanza y Alberto hagan campaña a nivel nacional para ayudar al líder, pero quien tiene que ganar las elecciones es Mariano Rajoy.

P.- ¿Cuándo tienen que decidirlo?

R.- El plazo que ha establecido el presidente del partido es que se empezará a hablar de las listas a la vuelta de Navidad y presentarlas unos días antes del inicio de la campaña.

P.- Sea como fuere, la última decisión la toma el comité nacional de listas, y aunque ustedes no incluyan al alcalde, su decisión puede ser enmendada.

R.- Efectivamente, nosotros proponemos la lista, pero quien la aprueba es el Comité Electoral Nacional.

P.- ¿Y espera que la lista que usted presente le sea aceptada?

R.- Espero que sí. De todas formas, el puesto que se ocupa en las lista es un debate ficticio. A nadie le importa quién es el número dos, el tres o el cinco de la lista del PP o del PSOE. A quien se vota es a Mariano Rajoy y a Rodríguez Zapatero, al proyecto que encabezan y a lo que representan políticamente. Introducir cualquier otro factor es una distorsión que no interesa a nadie.

P.- Tal vez, pero en el caso de Gallardón el quid de la cuestión es que aspira a ser sucesor, incluso dijo que quería ser presidente del Gobierno, y se armó la marimorena...

R.- A mí me parece muy legítimo que quien está en política tenga las máximas aspiraciones, y si quiere llegar a ser presidente del Gobierno lo diga. Lo importante no es decirlo, sino lo que uno está dispuesto a hacer y en qué momento para llegar a esa situación. Hoy por hoy, lo que toca es que Mariano Rajoy sea presidente del Gobierno.

P.- Pues prepárense para su reacción cuando sepa que no va en las listas.

R.- Estoy convencido de que Alberto, como cualquier otro militante, va a asumir las decisiones que tomen los órganos de dirección del partido. Si algo caracteriza a este partido es que está muy unido y es muy disciplinado.

P.- ¿Cree que Esperanza Aguirre puede llegar a ser presidenta del Gobierno?

R.- Como poder, creo que en principio puede llegar todo aquel que esté en el mundo de la política y tenga las capacidades para ello. Desde ese punto de vista, claro que podría. Otra cosa es que quiera o que se den las circunstancias para que eso sea así. Yo, personalmente, creo que en estos momentos no.

P.- ¿Le gustaría que su partido fuera el primero en proponer una mujer candidata a La Moncloa?

R.- Sí, claro que me gustaría porque siempre hemos sido los primeros en poner a mujeres al frente de instituciones donde antes no lo estaban. Esperanza Aguirre, Luisa Fernanda Rudí, etcétera.

P.- El problema es que en el PP no se aceptan las sensibilidades, cosa que en el PSOE es algo corriente.

R.- No, no, en el PP se aceptan también las sensibilidades. El problema es que a la derecha pretenden desgastarla por el hecho de que haya diversas sensibilidades. Y se quiere plantear eso como una división que no existe. En el PP, no he visto ninguna ruptura, y miro al PSOE y está lleno de rupturas. Acabamos de ver que la señora Chacón le da un bofetón a Bono, Zapatero le ha dado un bofetón a Solbes con el impuesto de patrimonio, y Solbes a Caldera con la subida del salario mínimo, y así sucesivamente. Por no hablar de Montilla, que dice no sentirse identificado con el PSOE. Y eso curiosamente es un partido unido y progresista.

P.- Vamos, que eso de que el PP tiene dos almas, Rajoy y Acebes, o Esperanza y Gallardón, es falso.

R.- El PP solo tiene un alma. La que deciden sus militantes. El que tiene 27 almas es Zapatero, y lo que tienen que explicar dentro del PSOE los que se llaman españolistas como el señor Bono es por qué a la hora de la verdad votan barbaridades como las que ponen en cuestión la integridad del Estado.

P.- Vamos, que Gallardón no es el Bono del PP.

R.- ¿En qué sentido?

P.- En que es un verso suelto.

R.- A mí no me parece admisible en un partido pretender ser alguien que basa su diferencia en un distanciamiento permanente de los compañeros. Lo haga quien lo haga. Lo que no se puede es jugar a una cosa y la contraria. Eso es lo mínimo que exige la disciplina de partido.

P.- Hombre, usted mismo llegó a acusar a Gallardón de dejarse utilizar por el PSOE.

R.- Lo que dije es que llamaba la atención que Alberto, sin darse cuenta, estaba siendo utilizado por el PSOE como un instrumento de confrontación. Lo dije y sé que eso planteó polémica, pero era evidente. El PSOE intentó escenificar una confrontación entre Alberto y Esperanza para alentar una estrategia política que pretendía presentar a Esperanza mas a la derecha y Alberto más a la izquierda. Y no podíamos aceptarlo.

P.- ¿Es verdad, como dijo Aguirre, que Zapatero ha maltratado y maltrata a Madrid en los Presupuestos generales del Estado?

R.- Ese es un hecho objetivo. Somos la única comunidad que baja con relación a 2003. Desde 2003 a 2008, el señor Zapatero no solo no ha invertido ni un euro nuevo en infraestructuras de Madrid sino que ha recortado las cantidades destinadas a inversión a esta comunidad.

P.- Pero ustedes aportan más del doble que Cataluña a la caja común.

R.- Son dos cosas distintas. Nosotros somos la comunidad más solidaria y la que más aporta porque hemos hecho bien los deberes. Madrid ha crecido económicamente más que nadie y es lógico que contribuyamos más a la caja común porque creemos en el principio de solidaridad.

P.- ¿ Y es cierto que el 47% de la inversión que se hace en Madrid con cargo a los Presupuestos Generales del Estado se dedica a cubrir las necesidades de los ministerios?

R.- Sí, el 50% de las inversiones que refleja el Presupuesto del Estado en la Comunidad de Madrid se va en mesas, sillas, ordenadores de los ministerios, y el arreglo de la casa del señor Zapatero, el Palacio de La Moncloa.

P.- Cifras aparte, la legislatura termina con muchos nubarrones en la cuestión territorial.

R.- Esta legislatura ha sido nefasta, por un presidente irresponsable sin ningún otro proyecto que hacer concesiones a sus socios nacionalistas, separatistas y radicales para mantenerse en el poder. Hoy está cuestionada la integridad territorial de nuestro país por dos comunidades autónomas como el País Vasco y Cataluña. Y eso se debe a Zapatero y a su política errática. No tiene escrúpulos, y eso es muy peligroso.

P.- Y por si fuera poco, ETA vuelve a hacer lo de siempre y amenaza con seguir haciéndolo.

R.- ETA hace lo que ha hecho siempre. Quien tiene que explicar cuál es su política clara y transparente para combatir a ETA es el presidente del Gobierno. Tiene que decir que quiere derrotarla, y que descarta cualquier vía de negociación. Con una banda terrorista, por la vía de la negociación es imposible acabar, como se ha puesto de manifiesto a lo largo de estos 30 años.

P.- Parece que se va a ilegalizar a ANV antes de las elecciones.

R.- A ANV hay que ilegalizarla, y expulsarles de las instituciones. Lo inaceptable no es que el fiscal general quiera ahora ilegalizar ANV, es que lo haga en este momento, cuando le viene bien políticamente al Gobierno. ¿En qué han variado las circunstancias de ANV de ahora a hace unos meses para que sí se pueda ilegalizar y antes no? En nada. Es tremendo que el fiscal haya sido una mera correa de transmisión del Gobierno en un tema tan grave como es la lucha contra ETA.

P.- Lo que parece ir peor es la economía, por mucho que Solbes ponga al mal tiempo buena cara, ¿no?

R.- Yo he calificado a Solbes como el gran bluff de este Gobierno, porque ha vivido del cuento y de una imagen de hombre prudente, moderado, coherente, cuando la realidad es que ha tragado con todas y cada una de las cosas que le han parecido un disparate, ha practicado el tancredismo económico, no ha tomado ni una sola medida estructural desde el punto de vista de la situación económica. El resultado es que hay síntomas evidentes de recesión, la inflación está disparada, el empleo empieza a mostrar síntomas de asfixia y la balanza comercial está como está. ¿Dónde están las bondades económicas del señor Solbes?

P.- ¿Cuánto le preocupa la llamada operación Guateque?

R.- Por lo que sabemos, es una trama organizada por una serie de funcionarios para extorsionar a los ciudadanos cobrando dinero por unos trámites obligatorios para la concesión de una licencia, y eso es absolutamente inaceptable. Hay que acabar con este tipo de prácticas porque son inaceptables. Nos parece fenomenal que el juez actúe.