La Comisión de Comunicación pretende dar a la autora la oportunidad de que presente un escrito con las alegaciones que crea procedentes tanto en relación con el contenido del libro como con la polémica que ha generado.

Los vocales (Enrique López, Adolfo Prego, José Luis Requero, Montserrat Comas y Juan Carlos Campo) no han dado a Beni pautas para la elaboración del escrito con el fin de no limitarla en las explicaciones que quiera ofrecer. Dispondrá de un plazo que termina el 8 de enero, un día antes de que vuelva a reunirse la Comisión para decidir si debe continuar en el puesto de directora de comunicación del Tribunal Superior de Madrid (TSJM), para el que fue contratada por el CGPJ como personal eventual.

Ninguno de los cinco miembros de la Comisión de Comunicación defendió ayer la permanencia de Beni en ese puesto. Más bien lo contrario. «Ha quebrado la confianza del Consejo en ella, ha perjudicado a su marido, ha desprestigiado a otros magistrados y ha generado desconfianza en los jueces de Madrid. Es muy difícil asumir que, en esas circunstancias, pueda mantenerse como encargada de la política de comunicación del TSJ de Madrid», dijeron fuentes del grupo minoritario.

Los miembros del sector mayoritario -que por tres veces ha nombrado a Gómez Bermúdez presidente de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, lo que le permitió presidir el juicio del 11-M- expresaron su «decepción» con Beni no sólo por razones de confianza, sino también de incompatibilidad entre la publicación de un libro de esas características -para lo que no informó ni pidió ningún tipo de permiso al presidente del Consejo, Francisco Hernando, responsable último de su nombramiento- y su puesto en un gabinete de comunicación del CGPJ. «Una señora que trabaja para la Justicia no puede estar anotando las confidencias que le hace su marido para hacer negocio editorial, exhibiendo cuestiones de otros jueces y de un determinado proceso», manifestó uno de los vocales. El mismo consejero anunció que, si La soledad del juzgador no tiene consecuencias, recomendará a los jefes de prensa de los tribunales que empiecen a tomar notas de las confidencias judiciales que les lleguen para luego hacer el mismo tipo de negocio que Beni.

Fuentes del CGPJ indicaron que el acuerdo de posponer la decisión a enero se debe no sólo al deseo de oír sus explicaciones de Beni sino también a la voluntad de darle un plazo para que reflexione sobre la presentación de su dimisión antes de que la Comisión de Comunicación tenga que plantearse su cese.